jueves, 31 de marzo de 2022

Del archivo de Periodismo Libre

 HACE 39 AÑOS

Jueves 31 de marzo de 1983.

Luis Alfonso Mena S., en las calles de Popayán.

El reportero con las víctimas del terremoto que devastó a la capital del Cauca, hoy hace exactamente 39 años.

Laboraba en la época en el diario El Caleño.

Jueves 31 de marzo de 2022.

jueves, 24 de marzo de 2022

Es la hora de pasar de la esclavitud, al poder

 

Es la hora de pasar de la esclavitud, al poder: Gustavo Petro, el miércoles 23 de marzo.

FRANCIA SOLO DIJO LA VERDAD: GAVIRIA ES NEOLIBERAL Y MÁS DE LO MISMO

 Por Luis Alfonso Mena S. *

No hay que dejar que el acto esperanzador del miércoles 23 de marzo de 2022 en Bogotá, lleno de simbolismos y de alegría con la presentación de Francia Márquez como fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro, sea empañado por el comunicado oportunista y mentiroso de César Gaviria.

¿O es que creen que este negociante de la política y de los gobiernos, paradigma del clientelismo y de la burocracia estatal, de verdad quiere "acuerdos programáticos" con la izquierda o piensa sinceramente en un gobierno popular y alternativo?

Yo no lo creo. Gaviria es uno de los brazos del pulpo oligárquico, segregador y promotor de la desigualdad que impide el ejercicio de sus derechos a los colombianos. Es continuador de ese bipartidismo liberal-conservador que ha usufructuado el poder por más de dos siglos en Colombia.

En su gobierno (1990-1994) fue el impulsor, con Álvaro Uribe, entonces senador liberal, de la nefasta Ley 100, que privatizó la salud y las pensiones, y de la introducción de Colombia en el neoliberalismo (la denominada “apertura económica”), que acabó con la industria nacional y millones de empleos.

Gaviria es el mismo que en 2018, luego de gritar con su voz chillona: “¡Uribe paraco, Uribe paraco!”, corrió a los brazos de Iván Duque, el candidato de Uribe, el paraco…

Al Pacto Histórico le toca ganar sin Gaviria y otros lastres. La derecha y la extrema derecha, con sus medios afines y abyectos, pretenden trazarle la agenda al campo alternativo. No hay que dejársela imponer.

Le corresponde al Pacto cautivar al pueblo liberal y al 55% de la ciudadanía abstencionista. Miremos las cifras: de un censo de 38 millones 820 mil personas habilitadas para votar, solo sufragaron 18 millones 35 mil, contabilizados los datos de Senado y Circunscripción Especial Indígena. Es decir, 20 millones 785 mil personas no votaron el 13 de marzo.

Al Pacto le corresponde cautivar al millón 182 mil votantes en blanco en esos comicios, a los 820 mil colombianos que anularon el voto y a los 594 mil que no marcaron sus papeletas, la mayoría porque no sabían manejar los tarjetones, pero que se acercaron de todas maneras a los puestos a votar. Dos millones 596 mil personas en números redondos.

En esas poblaciones está la clave. Fácil no es, pero hay que llegar a ellas.

ESPERABA EL FLORERO DE LLORENTE

Gaviria estaba esperando la menor excusa para zafarse de la posibilidad de alianzas con Petro y el Pacto Histórico. Es un politiquero de derecha.

Su posición es de clase (burguesa, oligárquica), lo más seguro es que ya tuviera decidida su alianza con Federico Gutiérrez, y usó la respuesta de Francia a una periodista al término del acto de presentación de su candidatura a la Vicepresidencia, para emprender las de Villadiego. No hay que caer en su juego. Francia no lo insultó ni dijo mentiras.

Gaviria es neoliberal y más de lo mismo. Eso fue todo lo que Francia dijo. Es decir, la verdad.

Petro sabía, al elegir a Francia como su fórmula presidencial, que ella es irreverente por formación y que no se va a quedar callada. Además, se ha ganado ese derecho.

Y, reitero, ella ni insultó ni irrespetó a Gaviria. Lo que pasa es que el señor de Pereira necesitaba un florero de Llorente para clausurar cualquier acercamiento con Petro porque ya tiene definido correr detrás de Gutiérrez. Eso es evidente. El candor en política es mal consejero.

TENSAR LAS FUERZAS DEL CAMBIO

Llegó la hora de, en este momento histórico, no poner en dependencia de lo que diga o decida un negociante de la política el futuro de la Presidencia de Petro.

De tensar las fuerzas del cambio y de, si de verdad este caudal es indetenible, acrecentarlo con el esfuerzo de todos para triunfar el 29 de mayo. Reto monumental, pero así es.

Además, el liberalismo no es César Gaviria, son las bases que se dicen o se sienten de ese partido, que no son borregos y que, en buena parte, irán con Gustavo Petro.

No es que Gaviria dé la orden y todos pegan para donde él diga. Es un partido muy fragmentado. Ya Petro convocó una reunión a la que invita a los congresistas de la colectividad “roja” no comprometidos con las mafias.

El liberalismo es un partido policlasista, en el que imperan las tendencias y no hay obediencias ciegas.

Gaviria, además de neoliberal y “más de lo mismo”, es un vulgar machista: cree que a una líder la puede mandar a callar, como sugiere en su comunicado de la tarde del miércoles pasado. Grotesco.

Desde el principio se sabía que la cuestión con él no era fácil. Es más, su decisión entre Gutiérrez y Petro la había anunciado para luego de Semana Santa. Se tuvo que anticipar al perder la opción de pedir la candidatura vicepresidencial.

Así que solo hacía cálculos. Estaba buscando el que más le dé, y ese no será Petro, obviamente.

Estamos ante dos grandes retos: la derrota del neoliberalismo y la ruptura con la histórica dependencia del campo alternativo y la izquierda de figurones liberales.

UN DATO CLAVE

Un dato final clave: Gaviria fue nombrado por Juan Manuel Santo jefe del debate por el Sí en el plebiscito sobre el Acuerdo de Paz del 2 de octubre de 2016, que se perdió frente al no.

¿Garantizó el triunfo en aquella coyuntura? No. ¿Respondió Gaviria por la derrota del Sí? No. Terminado el debate se fue de vacaciones…

Ese es el jefe liberal por el que algunos lloran, pero que es un verdadero fiasco… Por eso va para donde Fico.

Como dijo Petro, que escojan: están con el cambio o están con el fascismo…

Es la hora de pasar de la esclavitud, al poder.

Cali, jueves 24 de marzo de 2022.

*Periodista colombiano, abogado, magister en historia, docente universitario, escritor.


PERIODISMO LIBRE CALI.

martes, 22 de marzo de 2022

Reflexiones

 SE CAYÓ LA PATRAÑA URIBISTA

Por Luis Alfonso Mena S.

Se le cayó la patraña del reconteo al uribismo, con la que buscaba asaltar los votos recuperados por el Pacto Histórico en franca lid.

Los únicos partidos que finalmente solicitaron tal maniobra nefasta fueron el uribismo y Oxígeno, el de la venenosa Ingrid.

Los demás, por aplastante mayoría, la negaron. Se quedaron solos uribistas y Verde Oxígeno, porque hasta los godos tambalearon en la postura.

El registrador indicó en la reunión de la "comisión de garantías" eso: no presentará la propuesta al Consejo Nacional Electoral.

Corolario: Álvaro Uribe y Andrés Pastrana, cada vez más solos.

Martes 22 de marzo de 2022.

Periodismo Libre, Cali

La extrema derecha, desesperada por su derrota inminente


URIBE Y PASTRANA LLAMAN AL AUTOGOLPE PARA ASALTAR LOS VOTOS RECUPERADOS POR EL PACTO HISTÓRICO

Por Luis Alfonso Mena S.

¿A alguien le quedan dudas de que la oligarquía colombiana es capaz de los peores procederes para defender su poder perverso?

Explicaré en quince pasos lo ocurrido entre el viernes 18 y el lunes 21 de marzo, en la oscurecida coyuntura nacional:

1. En la falsa "democracia" que hay en Colombia, es el régimen oligárquico el que hace trampa antes, en y luego de las elecciones.

2. Cuando la trampa del régimen es desenmascarada, sus peores capos, alias Matarife y alias Patraña, procuran darle la vuelta a la torta.

3. Matarife y Patraña señalan cínica y miserablemente al Pacto Histórico de haberse hecho fraude él mismo. ¡Qué tal la infamia!

4. Uribe les da la orden a sus mandaderos de que hagan reconteo del escrutinio ya hecho, para arrebatarle de nuevo los votos al Pacto Histórico.

5. La orden de alias Matarife, que se resiste a aceptar la derrota, es asumida ipso facto por el títere Duque y el Registrador inepto.

6. Van al Consejo Electoral, aparato de bolsillo del régimen, con mayoría 8-1, para consumar el golpe a la voluntad popular.

7. Con los votos ya al garete, sin cadena de custodia, desconociendo los fallos de 5.000 jueces, el régimen arruma los E-14.

8. Hacen todo para desconocer los 500.000 votos recuperados ya en franca lid por el Pacto Histórico, y burlarse otra vez del pueblo.

9. Para asaltar la voluntad popular, Matarife y Patraña cuentan con la prensa arrodillada, cómplice del fraude electoral que preparan.

10. Los jefes del régimen uribista tienen el apoyo de Facho Gutiérrez y de la venenosa Ingrid Betancourt, sus dos candidatos.

11. Estamos ante la amenaza de un autogolpe de Estado de la ultra derecha, capaz de cualquier barbaridad para frenar a Gustavo Petro.

12. Solo la unidad del pueblo progresista y alternativo dará al traste con la maniobra de Matarife, Patraña y sus secuaces.

13. Se inicia una nueva fase de lucha en defensa de los votos y las curules del Pacto Histórico, y de lo poco que queda de democracia en Colombia.

14. El frente amplio por la democracia y la paz en el que los únicos que no caben son los corruptos y los genocidas, como ha dicho Gustavo Petro, se debe abrir paso para atajar al fascismo.

15. Cuando el Pacto Histórico protestó, el régimen calló; cuando el uribismo llamó al golpe de Estado, el régimen tomó partido por éste.

Digamos no al autogolpe uribista, no a las maniobras contra el Pacto Histórico y los votos del pueblo.

El uribismo y su régimen corrupto-paramilitar son el pasado; Petro y el Pacto son el futuro.

Nadie ha dicho que el cambio será fácil, pero lo que si es seguro es que es inevitable.

Cali, martes 22 de marzo de 2022.

PERIODISMO LIBRE, CALI

sábado, 19 de marzo de 2022

La Entrevista, en Periodismo Libre


“EN EL VALLE DEL CAUCA, EL PACTO HISTÓRICO DOBLEGÓ AL VIEJO PODER”, DICE GILDARDO SILVA MOLINA

Gildardo Silva Molina, dirigente de la Unión Patriótica y ex candidato a la Cámara de Representantes por el Pacto Histórico, habló con Luis Alfonso Mena S., de Periodismo Libre, y dijo:

“No hemos sido inferiores a los resultados que se han dado”.

“Hemos ganado donde están los trabajadores”.

“Ahora, para vencer al viejo bloque de poder a nivel nacional, debemos ganar en primera vuelta”.

“Tenemos que ganar para cambiar a Colombia”.

Viernes 18 de marzo de 2022.

PERIODISMO LIBRE, CALI

viernes, 18 de marzo de 2022

El Pacto Histórico recupera más 500.000 votos ‘abudineados’

 








LA INCREÍBLE Y TRISTE HISTORIA DEL RÉGIMEN DEL MEGAFRAUDE Y DE SU PRENSA ARRODILLADA

Por Luis Alfonso Mena S.

Parodiando el título del extraordinario relato literario de Gabriel García Márquez La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y de su abuela desalmada, lo que está ocurriendo en Colombia luego de los comicios del domingo 13 de marzo es un hecho de tal magnitud que deja en evidencia la perversidad del sistema electoral en nuestro país y configura lo que denominamos como La increíble y triste historia del régimen del megafraude electoral y de su prensa arrodillada.

En este caso, la historia es al revés del relato literario, porque el régimen no es ni cándido ni inocente ni ingenuo como la pobre Eréndira, sino que ocupa el espacio de la abuela perversa y corrompida, que prostituía a su joven nieta.

La abuela desalmada es un sistema electoral anquilosado y antidemocrático, como lo indicábamos en nuestro primer análisis poselectoral (ver Periodismo Libre del 14 de marzo), sistema hecho a la medida de las trampas, irregularidades y toda clase de triquiñuelas para burlar la voluntad de la gente en favor de los partidos del establecimiento oligárquico imperante.

El fraude no es nuevo en las elecciones en Colombia: acuérdense de cómo le robaron las elecciones a la Alianza Nacional Popular, Anapo, y a su candidato presidencial, Gustavo Rojas Pinilla, en los tristemente célebres comicios del 19 de abril de 1970, en el gobierno del liberal Calos Lleras Restrepo, en favor del conservador Misael Pastrana Borrero, papá de Andrés Pastrana Arango, presidente entre 1998 y 2002.

Lo nuevo es que en esta ocasión,  año 2022, las antenas de alerta y vigilancia muy bien puestas por la Coalición Pacto Histórico detectaron a tiempo lo ocurrido: que en más de 29.000 mesas al Pacto, que había alcanzado la mayor cantidad de votos de las listas al Senado, la Cámara y todas las consultas presidenciales, no le habían registrado ni un solo voto, algo absolutamente absurdo y que únicamente se podía interpretar como una acción premeditada para evitar que su triunfo fuera más contundente.

Disparadas las alarmas, se produjo la reacción de activistas y abogados, que en el escrutinio iniciado el lunes 14 de marzo han corroborado, día a día, que al Pacto Histórico le ‘abudinearon’ (“escondieron”) más de 500.000 votos, lo que significa que, de 16 curules en el Senado reconocidas en el preconteo, pasará a 20, más las dos de la Circunscripción Especial Indígena, que son de dos movimientos integrantes del Pacto Histórico.

Y la historia también nos muestra que el megafraude ha contado, otra vez, con un cómplice: la prensa del sistema reunida en los conocidos como medios masivos tradicionales de comunicación que, tan perversos como la abuela desalmada que abusaba de la cándida Eréndira de la novela corta o cuento largo de García Márquez publicado en 1974, han guardado silencio, muy ocupados como están en tergiversar y en tratar de torcer, con mentiras y cinismo, las propuestas en favor del pueblo formuladas por Gustavo Petro.

El silencio de El País, El Tiempo, El Espectador, Caracol Radio y Tv, RCN Radio y Tv, Blu Radio, Semana, etc., etc., etc. resulta atronador. Si, silenció atronador, estruendoso, así parezca contradictorio. Es un oxímoron (contradicción aparente en un binomio de palabras, pero con enorme e impactante significación).

Todos los medios de las élites se han dado a la tarea de no hablar del tema, lo han escabullido, se le han escondido, pero a hoy, viernes 18 de marzo, cuando ya es clamoroso el escándalo e inocultables las irregularidades, lo tocan, aunque insisten en hablar de “diseño erróneo” del formulario donde debían ir consignadas las cifras totales de los votos, de errores humanos, de problemas en la transmisión de los datos y toda clase de artilugios.

Pero si algo parecido hubiera ocurrido en algún país no afín a las políticas del Pentágono gringo o de los gobiernos oligárquicos del continente, hace rato, automáticamente, estarían gritando: “¡Fraude, fraude, fraude!”. Esa es su doble moral.

EXTRAÑAS Y MÚLTIPLES “COINCIDENCIAS”

Como ha dicho el candidato presidencial del Pacto Histórico, Gustavo Petro, “No es posible estadísticamente que en una mesa todos los jurados se equivoquen al mismo tiempo en una suma”.

Y añade Petro: “La salida de los profesores de la lista de jurados presionada por Uribe tenía un objetivo: producir los jurados homogéneos para alterar resultados por decenas de miles”.

Aunque Petro y la dirigencia del Pacto Histórico se han abstenido con cautela de denominar lo ocurrido en estas elecciones como fraude, todo conduce a que eso es lo que ha ocurrido.

No de otra manera se pueden llamar las extrañas “coincidencias” de miles y miles de jurados, puestos de acuerdo al parecer por los astros, según se puede deducir de las justificaciones increíbles, inverosímiles dadas por la prensa del sistema, mandadera del régimen duquista.

No estamos hablando de casos “aislados”, sueltos, esporádicos, de “manzanas podridas”, como suelen decir siempre: son más de 29.000 mesas, más del 25% de todas las instaladas en el país, cuyos jurados, por acción u omisión, todos a una, no reportaron la votación del Pacto. Y, lo más delicado, Gobierno, Registraduría y medios siguen justificando cínicamente ese proceder.

Además de los más de 500.000 votos recuperados por los activistas, testigos y juristas del Pacto Histórico, en este proceso otro partido altamente damnificado por la antidemocracia y el fraude es Fuerza Ciudadana, que también podría recuperar votos y alcanzar el umbral que lo está dejando por fuera, a pesar de haber obtenido cerca de 450.000 votos en todo el país.

El descubrimiento del megafraude constituye una alerta para los comicios presidenciales del 29 de mayo, pues es una clara evidencia de la reiteración de lo que históricamente se ha denunciado en Colombia: que el anacrónico, arcaico y antidemocrático sistema electoral está orientado y fríamente dirigido a favorecer a los partidos de la oligarquía.

Una prueba de ello es que los únicos que no han reclamado son los partidos corruptos y clientelistas de la derecha.

El registrador Alexander Vega sigue usando eufemismos, muy al estilo del duquismo-uribismo, para enmascarar los hechos, con la complicidad de la prensa, y aferrado a su puesto, como todos los altos burócratas del régimen, sin asumir su responsabilidad política y administrativa, por acción u omisión.

Es la política de ‘abudinear’ (desconocer) la voluntad popular puesta de moda hoy en Colombia.

Las alarmas están encendidas, para que la increíble y triste historia del régimen fraudulento y de su prensa arrodillada no se repita el 29 de mayo, en la intención que tienen, y no ocultan, de burlar la voluntad de la mayoría, que ya no soporta más corrupción, “errores involuntarios”, ineficiencia, diseños premeditadamente dañinos contra las fuerzas alternativas y un largo etc. del armario jurídico instaurado por gamonales, terratenientes y oligarcas financieros en su Congreso de la República.

El régimen perverso y su prensa arrodillada deben entender, de una vez por todas, que hay una ciudadanía alerta y vigilante, que no come más cuento, así le quieran ocultar la realidad con la crisis en Ucrania y el refrito de las “expropiaciones”, como califican, de manera infame y mentirosa, todo cuanto propone Gustavo Petro.

Buena parte del pueblo colombiano dejó de ser cándido y no permitirá más burlas del sistema y de sus medios desalmados.

Cali, viernes 18 de marzo de 2022.

PERIODISMO LIBRE, CALI

miércoles, 16 de marzo de 2022

Emigrados TV, en Periodismo Libre


COLOMBIA: ANÁLISIS DE RESULTADOS ELECTORALES Y PROYECCIONES POLÍTICAS, CON LUIS ALFONSO MENA S., EN EMIGRADOS TV

Emigrados TV, 
Panorama 
Bilbao, EuskalHerria, 
Presenta Eliécer Jiménez Julio desde Ginebra, Suiza. 

Invitado: Luis Alfonso Mena, abogado, periodista, historiador, profesor y analista político desde Colombia. 

Con todo el análisis de la jornada electoral ocurrida el pasado domingo 13 de marzo, en la fueron elegidos senadores y representantes a la Cámara, así como en consulta interna de partidos y movimientos políticos se escogieron candidatos para las elecciones presidenciales en este país suramericano, el cual es gobernado desde hace décadas por un régimen de derecha que tiene sumido al país en una ola violencia, corrupción, impunidad y miseria.
 
La población se debate entre el continuismo de la derecha de los partidos oligárquicos o el cambio hacia un progresismo con el Pacto Histórico.

REPRODUCE: PERIODISMO LIBRE

Miércoles 16 de marzo de 2022.

lunes, 14 de marzo de 2022

Análisis de las elecciones del 13 de marzo

 EL TRIUNFO HISTÓRICO DEL PACTO Y LA RESISTENCIA POPULAR

Por Luis Alfonso Mena S.

El Pacto Histórico emergió este domingo 13 de marzo como la primera fuerza política de Colombia, no solo por la extraordinaria votación de Gustavo Petro, que superó la de todas las consultas, sino por alcanzar la mayor votación para el Senado de la República y para la Cámara de Representantes, sumadas todas las circunscripciones departamentales.

Estos resultados los podemos entender como el inicio en firme del camino hacia el cambio de la cultura política colombiana, pues persiste un sistema electoral anquilosado y antidemocrático que relega fuerzas por la falta de proporcionalidad en la repartición de curules, derivado ello de la aplicación de un umbral descalificador, y porque ese sistema poco hace contra la corrupción electoral.

La votación del Pacto Histórico se fraguó a pesar y en contra de la compra masiva de votos promovida por las mafias de los partidos tradicionales y de los nuevos partidos de la oligarquía; contra el constreñimiento ejercido de manera masiva por funcionarios del Estado sobre empleados y trabajadores públicos y oficiales, y contra las maquinarias multimillonarias de las empresas electorales del establecimiento, apoyadas en la contratación pública.

Para esto último fueron levantadas las restricciones que imponía la Ley de Garantías… Y vaya que esa decisión típica de una clase política corrupta dueña hasta ahora de la mayoría del Congreso sí que se notó y les dio resultado a las estructuras del poder.

Así que, enfrentando todo esto, el Pacto obtuvo los más altos guarismos nominales en consultas, Senado y Cámara.

De esa magnitud es el logro del Pacto, que en la consulta alcanzó cinco millones 600 mil votos, cuatro millones y medio por el ganador de ella, el hoy ya candidato presidencial Gustavo Petro Urrego.

Fue un triunfo, igualmente, contra la guerra sucia, las mentiras y las calumnias propaladas por las derechas y su enorme maquinaria mediática.

Los más de dos millones 300 mil votos del Pacto para su lista cerrada al Senado le permiten elegir 16 curules, punto de partida para alianzas con otros sectores políticos, aunque es lamentable la pérdida de opción de acceder a curules por parte de Fuerza Ciudadana, a pesar de sus 450 mil votos, liderados por Gilberto Tobón.

La equivocada estrategia de abrir otra lista afín a Gustavo Pedro, pero de voto preferente, privó al Pacto de ese registro importante de Fuerza Ciudadana, cuya votación se perdió, pues no alcanzó el umbral, por efectos del sistema electoral antidemocrático que señalamos arriba, votos que le hubieran permitido al campo alternativo tener no 16 sino 20 senadores.

 

BOQUETE A LA HEGEMONÍA EN LAS REGIONES 

En cuanto a la Cámara de Representantes, los casi dos millones 600 mil votos del Pacto, sumadas todas las listas por departamentos, le permiten acceder a 25 curules, incluida la de colombianos en el exterior, en la persona de la líder indígena en el exilio Carmen Felisa Ramírez Boscán, quien rompió la hegemonía del uribismo en el exterior.

Pero a esas 25 curules hay que agregar las del Pacto Histórico en el departamento de Bolívar, donde fue elegida con una alta votación (más de 80 mil papeletas) la líder palenquera Durina Hernández Palomino, y la del departamento del Meta, además de curules del Pacto en coalición con Alianza Verde en los departamentos del Tolima y Caldas, para un total de 29.

De igual manera, se deben tener en cuenta en la Cámara por las fuerzas alternativas dos bancas alcanzadas en el departamento de Risaralda por la coalición Polo Democrático-Alianza Verde y la curul lograda por Fuerza Ciudadana en el departamento del Magdalena, subiendo así a 32 los escaños progresistas en la Cámara de Representantes.

Lo anterior, sin contar otros posibles aliados en ambas cámaras, procedentes de las circunscripciones indígenas, como Aída Marina Quilcué, elegida por el Movimiento Alternativo Independiente y Social, Maís, en el Senado.  

Finalmente, es necesario plantear que los partidos tradicionales, Liberal y Conservador, volvieron por sus fueros, aceitaron bien sus maquinarias, y ocupan el segundo y tercer puesto en cuanto a los resultados en ambas cámaras legislativas.

Cedieron terreno y perdieron curules, sin embargo, los muy cuestionados partidos Cambio Radical, de la U y “Centro Democrático” (uribismo), a los que no les alcanzó su frondosa cuota burocrática y la multimillonaria irrigación de dineros para la compra de votos, como se ha denunciado de manera profusa en los últimos días.

Además, es muy preocupante la cooptación de un número grande de las 16 nuevas curules de paz que, en vez de quedar en manos de las víctimas, como era lo legislado, no pocas fueron a dar al registro de partidos oligárquicos, camarillas politiqueras y hasta de personas como el hijo del condenado paramilitar alias Jorge 40, quien terminó compitiendo solo en el departamento del Cesar, pues los demás contendientes se retiraron.

El establecimiento sigue siendo fuerte desde las regiones en el Congreso, pero el Pacto Histórico le ha abierto un boquete a su hegemonía.

 

DE LAS CALLES A LAS URNAS

Por otra parte, la participación electoral de las fuerzas comprometidas en el Pacto Histórico hay que entenderla en el marco de las luchas sociales y de las masivas resistencia juveniles y populares que vivió el país desde el 28 de abril de 2021 y a lo largo de tres meses, protestas de exigencias de derechos sociales que fue respondida a sangre y fuego por el régimen de Iván Duque.

Por eso es tan importante el resultado del Pacto en el Valle del Cauca, donde el campo alternativo no tenía ni un representante a la Cámara y ahora da el salto cualitativo a cinco, hecho que no solo deja al Pacto como la principal fuerza política en el departamento, sino que es evidencia de que la resistencia popular pasó de las calles a las urnas.

Los casi 400 mil votos del Pacto en el departamento y los 215 mil logrados en Cali constituyen una derrota para la extrema derecha, representada en el uribismo, Cambio Radical, el Conservatismo y otras estructuras de la política segregacionista de la región, que le apostaron no solo a desprestigiar la validez y legitimidad de la protesta, sino que creyeron, absurdamente, en una ilusoria “sanción” a la izquierda en las urnas.

Resultó todo lo contrario: la sanción fue para la extrema derecha, que desarrolló una política de odio y persecución contra la juventud y el pueblo en el Paro Nacional, patrocinó la represión más brutal y fue cómplice del paramilitarismo urbano evidenciado en las calles, protagonizado por sectores de la clase adinerada de Cali y municipios del Valle.

Así que es un hecho histórico inusitado que ahora el Valle tenga cinco representantes a la Cámara del campo alternativo, progresista y de izquierda, reflejo también de que la estrategia trazada por Petro de listas cerradas y cremallera dio resultados.

Pero es, igualmente, el acumulado de años y años de luchas populares de las que la población de Cali ha sido protagonista, desde el mítico e histórico levantamiento estudiantil de la Universidad del Valle, en 1971, y el Paro Cívico Nacional de 1977, hasta hoy.

Cali no solo fue la capital de la Resistencia en 2021, sino que ha sido epicentro de luchas sociales y políticas a lo largo de la historia contra la dictadura de Gustavo Rojas Pinilla y las políticas represivas del régimen del Frente Nacional, y se ha convertido también en la capital antiuribista de Colombia. Los resultados electorales y el apoyo de 290 mil caleños a Petro en la Consulta así lo muestran.

Vale la pena mencionar aquí los cinco elegidos por este departamento, que fue tan duramente golpeado por la represión de Iván Duque contra el Paro Nacional en todo el departamento, pero especialmente en Cartago, Tuluá, Buga, Yumbo, Palmira, Cali y Jamundí.

Son: José Alberto Tejada, Gloria Elena Arizabaleta, Cristóbal Caicedo Angulo, Jorge Alejandro Ocampo y Alfredo Mondragón Garzón, a quienes les espera el enorme reto de representar con denuedo al pueblo del Valle del Cauca en resistencia y, de manera especial, hacer honor desde la Cámara a la memoria de las víctimas del régimen, que en Cali fueron 48 y en municipios del departamento, 18.

El Valle del Cauca espera mucho de sus cinco representantes a la Cámara y de los tres senadores de esta región elegidos en la lista nacional de Senado (Alexander López Maya, Roy Barreras Montealegre y Wilson Arias Castillo).

El de ayer con el Pacto fue el triunfo de la juventud, cuya participación se notó en las urnas y se tendrá que redoblar camino al 29 de mayo, como uno de los elementos para garantizar la victoria en primera vuelta y toda vez que un eventual gobierno de Petro lo será igualmente de la juventud colombiana, empoderada y en resistencia.


FRENTE AMPLIO, LA ESTRATEGIA

¿Qué sigue ahora? Corresponde ser estratégicos, y por eso Petro va paso a paso en la definición de la fórmula vicepresidencial, pues se esperan alinderamientos de sectores que no han estado con el Pacto hasta ahora, y urge la expansión del espectro político de las alianzas hacia una confluencia más grande.

La participación de Francia Márquez en la Consulta, con casi 800 mil votos (superando incluso al ganador de la consulta del centro, Sergio Fajardo), fue extraordinaria, pero no se puede olvidar que gran parte de esa votación se debe también al Polo Democrático, el partido que integra el Pacto Histórico y la avaló a ella.

El Polo asumió este respaldo como su carta de presentación luego del retiro del Moir (Jorge Robledo orientó la escisión del Polo para fundar el Partido Dignidad), e históricamente siempre ha puesto 500.000 votos para el Congreso. Iván Cepeda y, sobre todo, Alexander López, se echaron al hombro la candidatura.

Hay que ganar en primera vuelta y, para ello, se requiere ampliar el espectro, así haya aliados que no gusten a integrantes del Pacto. Esa es una percepción que empieza a ganar terreno, pues una segunda vuelta sería muy peligrosa para el objetivo del Pacto Histórico de llegar a la Casa de Nariño.

Por eso, con visión estratégica, Petro planteó el domingo 13 de marzo, en su discurso de la primera victoria de esta lid por la Presidencia: “Aquí los únicos que no caben son los corruptos y los genocidas”. En consecuencia, se abre el proceso de configurar lo que él ha denominado el Frente Amplio, un espacio político más allá del Pacto Histórico.

La derecha sabe que el Pacto y Petro picaron en punta, y ya se produjo la primera deserción: Óscar Iván Zuluaga, el fusible uribista, se quemó mucho antes de lo previsto y este lunes renunció a su aspiración para sumarse a Federico Gutiérrez.

Quedan nueve aspirantes presidenciales contrincantes de Petro, pero con seguridad habrá nuevos retiros de aquí al viernes, cuando se cierren las modificaciones de inscripciones.

La mayoría de esas deserciones se irán al lado de Gutiérrez, quien solo alcanzó dos millones 150 mil votos en la consulta de la derecha, menos de la mitad de los votos logrados por Petro, y le urge fortalecer su aparataje.

En cuanto a Germán Vargas Lleras, los malos resultados de su partido, Cambio Radical, para el Congreso no lo dejan bien posicionado.

Él había puesto en dependencia de las cifras de este domingo su lanzamiento como otro candidato de la derecha en la lid por la presidencia. Todo indica que desistirá en los próximos días.

Hasta ahora siguen en la pugna, además de Gutiérrez y Fajardo, el candidato del centro que solo obtuvo 721 mil votos en su consulta, otros siete, que no participaron en las primarias.

Son: Rodolfo Hernández (admirador de Hitler, de Liga Anticorrupción), Enrique Gómez Martínez (conservador, del Movimiento de Salvación Nacional), Jhon Milton Rodríguez (ultra godo de iglesias cristianas), Germán Córdoba (inscrito para guardarle el puesto a Vargas Lleras) e Ingrid Betancourt (de Oxígeno Verde). Estos cinco, aspirantes del campo de la derecha y la extrema derecha.

Hay otros dos aspirantes, Luis Pérez (liberal inscrito como independiente) y Luis Gilberto Murillo (de Colombia Renaciente). Especialmente este último, podría dar un viraje ante el muy escaso alcance de su aspiración y unirse a Petro.

Se avecinan dos meses y medio de intensas luchas y nueve candidatos enfrentados a Gustavo Petro. Ahora, el pueblo colombiano tiene la palabra y los votos, pues fueron millones los que se abstuvieron de ir a las urnas el 13 de marzo. Seguramente, el Pacto Histórico irá por ellos.

Cali, lunes 14 de marzo de 2022.

*PERIODISMO LIBRE, CALI*


LA GRÁFICA: Celebración del triunfo del Pacto Histórico y Gustavo Petro el domingo 13 de marzo de 2022. (Foto: Tomada del Twitter de Francia Márquez).

viernes, 11 de marzo de 2022

Perfiles analíticos de los 23 candidatos y precandidatos en 2022

 

DICCIONARIO POLÍTICO DE LA PUGNA POR LA PRESIDENCIA EN COLOMBIA

 Por Luis Alfonso Mena S.

Colombia se debate por estos días en medio de un complejo panorama político electoral, en el que confluyen centenares de aspirantes al Congreso de la República, pero, también, 23 candidatos presidenciales, 15 de los cuales son precandidatos inscritos dentro de las consultas de tres coaliciones de partidos, que obran a manera de primarias para seleccionar, este domingo 13 de marzo de 2022, el aspirante definitivo de cada una de ellas.

Las coaliciones son Pacto Histórico (progresismo e izquierda), Centro Esperanza y Equipo por Colombia (derecha). Los otros 8 aspirantes, varios de ellos de extrema derecha, no participan en las consultas.

Luego del 13 de marzo, la puja electoral empezará a decantarse. Pero todo indica que serán diez candidatos del centro, la derecha y la extrema derecha contra la posibilidad del cambio que anhela la mayoría del pueblo colombiano representada por Gustavo Petro y el Pacto Histórico.

De esa magnitud es el reto que le esperan a Petro y al Pacto.

Los partidos y facciones del establecimiento oligárquico entraron hace rato en pánico por el cambio histórico que se avecina, en tanto que el entusiasmo y las expectativas del campo alternativo y de izquierda se multiplican e inundan el ambiente político nacional e, incluso, el internacional.

Es indudable que la figura de Petro y la experiencia política que se expresa en el Pacto Histórico constituyen un factor subjetivo de enorme significación, que puede empezar a voltear la historia de nuestra martirizada Colombia e iniciar el camino de las transformaciones represadas por más de 200 años de regímenes oligárquicos promotores de la desigualdad y la violencia.

UNO POR UNO

Haremos a continuación una rápida radiografía del espectro de las 15 precandidaturas y de las 8 candidaturas presidenciales, a manera de diccionario, en orden alfabético y con breves caracterizaciones de los participantes:

AMAYA, CARLOS (37 años). Opaca figura de los tibios, ex gobernador de Boyacá, inscrito con el aval del partido Dignidad, flotador de última hora lanzado por el senador Jorge Robledo luego de que, de un momento a otro, se lo quitara la francesa Ingrid Betancur en uno de sus arranques de ira. Nada que mostrar, a no ser la bicicleta que le regaló Nairo Quintana, el ciclista, que se le adhirió contrarreloj. Estuvo enfrascado en peleas internas con sus compañeros de alianza, cuestionando sus amistades políticas y sus entramados burocráticos (como los que le develó a los hermanos Galán), pero sin mostrar los suyos.

BARGUIL, DAVID (40 años). Joven fósil del Partido Conservador en el Congreso de la República, experto en excusas médicas, aunque el Consejo de Estado, alto tribunal tan godo como él, dijo para absolverlo que no se habían demostrado sus ya famosas y notables inasistencias a las sesiones del Senado. Fue uno de los defensores de la brutal represión con la que el régimen de Iván Duque respondió a los justos reclamos de la juventud en el Paro Nacional. Su designación como precandidato azul se produjo por decisión de un reducido cónclave de directivos anacrónicos del partido que ha parasitado en burocracia, clientelismo y contratos desde los albores de la República, en el Siglo XIX, hasta hoy. Uno de sus propulsores es Andrés Pastrana, expresidente venido a menos desde hace rato, dedicado en los últimos años a construir con lo más rancio de los partidos monárquicos y conservadores de España y de EE.UU. una alianza anticomunista como las que se fraguaban en la época de la Guerra Fría, soñador él del regreso al pasado.

BETANCOURT, INGRID (60 años). Rayo descendiente del olimpo francés que cada cuatro años cae sobre Colombia a dar lecciones de moral y a juzgar, con su vara de hada ponzoñosa, a todo aquel que identifica como adversario en el voto de opinión para la Presidencia. Gran paradigma del oportunismo, ni corta ni perezosa dejó su poltrona en París tan pronto le dieron respiración legal a Oxígeno Verde, su grupo de los años noventa, y aterrizó para implosionar la coalición de centro a la que había prometido fidelidad. En verdad, su Santa Inquisición solo la utilizó contra Gustavo Petro y Alejandro Gaviria, pues, en un muy televisado acto de ridículo y cinismo ya memorable, ante su desconocimiento de lo que pasa en el país, recurrió nada menos que a RCN para que le dijera si los candidatos del uribismo, Cambio Radical y la U tenían maquinarias politiqueras o no. ¡Qué tal esto! Su fórmula presidencial es un coronel del Ejército colombiano.

CHAR, ALEJANDRO (55 años). Magnate de la cadena de tiendas y droguerías Olímpica, con cadena de radio propia, banco y equipo de fútbol, entre otros haberes del Clan familiar. En la Alcaldía de Barranquilla y en su carrera política siempre ha estado al mando en la Costa Atlántica de Cambio Radical, uno de los partidos políticos más desprestigiados de Colombia. Sin embargo, no se inscribió por esta colectividad, sino que recaudó en tiempo récord miles de firmas con el fin de inscribirse por un grupo que bautizó País de Oportunidades. Lo hizo en la consulta de la derecha, Coalición Equipo por Colombia. Su estrategia ha consistido en esconderse de los debates y de las entrevistas cuestionadoras. Y ello, no solo por su falta de propuestas de fondo, sino por miedo a tener que responder por las gravísimas denuncias de presuntos aportes multimillonarios hechos a la campaña al Senado de su socia Aida Merlano con destino a la compra de votos. Por efectos de estas revelaciones, su candidatura está en picada dentro de la coalición a la que pertenece, muy a pesar del uribismo, que lo veía como su carta bajo la manga. Muchos dicen que ni las contrataciones fabulosas para el Atlético Junior lo salvarán de la derrota. Pero hay también quienes creen que el poder económico de su familia da para todo, pues no es la primera denuncia que pesa sobre él. Muchos hoy preguntan por el famoso contrato del tanque de agua de Barranquilla... Y, para completar, se avizora el lanzamiento de su antiguo jefe, Germán Vargas Lleras. Así que todo indica que la aspiración de Alejandro Char se quedó en veremos. Aunque los cuestionados candidatos de Cambio Radical en el Atlántico a Cámara y Senado, corporación a la que aspira de nuevo su hermano, el salsero, se dan por reelegidos…  

CÓRDOBA, GERMÁN. Presidente del partido Cambio Radical, como dijimos arriba, uno de los grupos políticos con mayores índices de desprestigio a nivel nacional y que fue la última colectividad en anunciar la inscripción de candidato a la Presidencia de la República. En realidad, se da por un hecho que la inscripción de Córdoba, con fórmula vicepresidencial incluida, es solo una “separación de cupos” para cambiarlo después de los resultados del 13 de marzo por el verdadero candidato, el godo GERMÁN VARGAS LLERAS, quien, aunque casi le da de coscorrones (como suele hacer) a uno de sus áulicos (David Luna) por haber adelantado hace semanas la intención de su jefe, todo indica que reemplazará el nombre de Córdoba por el suyo. Vargas Lleras, nieto de Carlos Lleras Restrepo, el tercer presidente del excluyente Frente Nacional (1958-1974), es en realidad la nueva carta de la derecha bogotana para tratar de contener el avance impetuoso de Gustavo Petro. Y para ello, este experto burócrata de las élites, de 60 años de edad, se cree con el recorrido para hacerlo, y seguramente se apresta a enrostrarle a la gente, como ya lo hizo en dos costosas cuñas publicitarias por televisión, que tiene “las ejecutorias” para ello, pero, obviamente, sin mencionar sus estruendosos fracasos con varios de los puentes de la costosísima infraestructura vial que tuvo a cargo en el gobierno de Juan Manuel Santos, del que fue vicepresidente, y varios de los cuales se cayeron, sin que hasta el momento los daños económicos derivados de esos hechos hayan sido resarcidos. Ya en los comicios presidenciales de 2014 Vargas Lleras fue estruendosamente derrotado por Petro. Y aunque en este 2022 esperará seguramente ser el punto de unión de toda la derecha en segunda vuelta, no la tiene nada fácil, porque la correlación de fuerzas ha cambiado sustancialmente, y la división del centro y la derecha en nueve candidatos le hará más difícil su propósito y podría contribuir al triunfo de Petro en primera vuelta, como lo ha trazado ya la Coalición Pacto Histórico.  

FAJARDO, SERGIO (65 años). Monotemático político recitador de ideas sobre la educación, discurso con el que responde todo lo que preguntan, una ardid que esconde su falta de estudio a fondo de los problemas del país. Por el lío de Hidroituango perdió la batalla frente al alcalde de Medellín. Se inscribió en la consulta de la Coalición Centro Esperanza con el aval de la Alianza Social Independiente, ASI, un grupo muy cuestionado por sus procederes clientelistas y politiqueros, que desdicen de la prédica de Fajardo, quien, igual que otros, se presenta como el impoluto y único honesto de la clase política criolla.

GALÁN, JUAN MANUEL (49 años). Beneficiario del legado de Luis Carlos Galán Sarmiento, hace parte también de la Coalición Centro Esperanza. En un rápido pugilato intergrupal, maniobró con innegables dotes de manzanillo para sacar del ring al senador Rodrigo Lara y, aprovechando el restablecimiento de la personería jurídica del partido fundado por su padre, el Nuevo Liberalismo, inscribir su precandidatura presidencial. Ha sido senador del famélico Partido Liberal Colombiano y su hermano Carlos Fernando, concejal de Bogotá y dirigente nacional del descompuesto partido Cambio Radical. Los dos jóvenes políticos medran a la sombra de la memoria de Galán. Y en su momento no se les dio nada hacer parte de camarillas politiqueras que nada tenían que ver con la lucha de su padre, como las de Germán Vargas Lleras y César Gaviria. En la campaña, Juan Manuel Galán ha sido megáfono de las mismas mentiras propaladas por otros candidatos presidenciales de la derecha contra Gustavo Petro, y cree que un triunfo de la izquierda en las elecciones es una amenaza contra la democracia. Tan joven y tan reaccionario, don Juan Manuel…

GAVIRIA, ALEJANDRO (55 años). Exministro de Salud de Juan Manuel Santos y ex rector de la elitista Universidad de los Andes, comenzó como posible candidato del Partido Liberal de César Gaviria, pero decidió sumarse a la Coalición Centro Esperanza y se inscribió con el aval del movimiento Colombia Tiene Futuro en esa alianza, en la que ahora los otros cuatro precandidatos le hacen el feo porque regresó a los contactos con el liberalismo y recibe adhesiones de la clase política tradicional. Entre sus propuestas se encuentra el incremento de la edad para pensionarse (¿más?) y es de los que cree que la Colombia de hoy es una “democracia”, sin decir ni mu sobre el régimen represivo imperante en Colombia, autoritario y antidemocrático.

GÓMEZ MARTÍNEZ, ENRIQUE (52 años). Heredero de la personería jurídica del Movimiento de Salvación Nacional, fundado por su tío, el senador Álvaro Gómez Hurtado. Aprovecha la oportunidad para irrigar el veneno típico de la ultraderecha goda, esa que lideró su abuelo, el tristemente recordado Laureano Gómez Castro, uno de los actores impunes de la oscura y tenebrosa época de La Violencia en Colombia (años cuarenta y cincuenta del Siglo XX). Se suma a la lista de los candidatos de derecha y extrema derecha cuya única misión estratégica es oponerse a la urgente necesidad de cambios estructurales en Colombia. No participa en coaliciones.

GUTIÉRREZ, FEDERICO (47 años). Ex alcalde de Medellín al que le apuestan no pocos sectores de la derecha y la extrema derecha uribista en la consulta presidencial, pues lo ven como su carta para los comicios del 29 de mayo. Quiere aparecer como tecnócrata, aunque ni para eso le alcanza. Conocedor del lastre terrible del uribismo, se inscribió en la coalición de la derecha (Equipo por Colombia) con el aval de Creemos Colombia, aunque se sabe que añora el respaldo del señor del Ubérrimo. Su campaña se ha limitado a atacar a Gustavo Petro, sin responder por su gestión en la Alcaldía de Medellín. Gris personaje del establecimiento, que puede resultar otro fusible si emerge la urgencia de nuevos acuerdos de la derecha para evitar el desastre electoral que se prevé para el campo del establecimiento oligárquico.

HERNÁNDEZ RODOLFO (76 años). Grotesco personaje de la ultraderecha colombiana, admirador del criminal Adolfo Hitler, basa su campaña en críticas a la corrupción, aunque él mismo tiene investigaciones encima derivadas del tiempo en que fue alcalde de Bucaramanga. Se fundamenta en la ramplonería y en el trato soez frente a cualquier crítica ciudadana. Pero es ese comportamiento amenazante, de insultos y bofetadas el que más les gusta a algunos sectores atrasados de la población, inmersos en la subcultura de “la ley del más fuerte y el más macho”. Su desconocimiento del país es abrumador, hasta el punto de que no sabe cuáles son los departamentos de la Colombia que aspira a gobernar. Dice que no irá a plaza pública y que se limitará a las redes sociales. Aparte de Hitler, al parecer se mira en los espejos de personajes como Trump, Bolsonaro, Bukele y Uribe, a quien le agradece su amistad, porque cree que el autoritarismo dictatorial será su norte. Se inscribió como aspirante de la Liga de Gobernantes contra la Corrupción y no participa de coaliciones.

LIZARAZO, AYDEE (57 años). Desconocida pastora del movimiento cristiano Mira, partido político religioso que instrumentaliza las lealtades de iglesia y que se ha convertido en otra estructura del partidismo oligárquico colombiano. Hace parte del oscuro gobierno de Iván Duque y votó a favor de la represión que éste desató contra el pueblo en el Paro Nacional de 2021. Compite sin ninguna opción en la Coalición Equipo por Colombia.

MÁRQUEZ, FRANCIA (39 años). Premio nobel alternativo del medio ambiente (Premio Goldman Prize de 2018) por sus luchas en contra de la minería ilegal y en defensa de las comunidades ancestrales del departamento del Cauca, de donde es oriunda (municipio de Suárez). Fue representante del Consejo Comunitario de La Toma. En la campaña electoral su aceptación ha crecido entre sectores alternativos y juveniles por sus posiciones críticas frente al establecimiento y en relación con reclamos de equidad de género y étnico. Coincide con Petro en la necesidad de sacar al país de la economía dependiente de la explotación del carbón y del petróleo. Inscribió su candidatura en la Consulta del Pacto Histórico con el aval del Polo Democrático Alternativo, partido que se ha mostrado muy activo en el respaldo a su campaña.

MURILLO, LUIS GILBERTO (55 años). Ex ministro del Medio Ambiente de Juan Manuel Santos, fue también gobernador del departamento del Chocó en dos ocasiones, la segunda de ellas con el aval de nadie menos que del partido Cambio Radical... Inscribió su candidatura a la Presidencia de la República en 2022 con aval del movimiento Colombia Renaciente, luego de que en la Coalición Centro Esperanza le interpusieran obstáculos para su inclusión en esa consulta, como fue su solicitud en primera instancia. Es ingeniero de Minas con estudios cursados en Moscú. No se le augura una votación promisoria, y probablemente termine del lado del candidato que surja de la consulta del centro político, a pesar de todo lo ocurrido.

PEÑALOSA, ENRIQUE (67 años). Ex alcalde de Bogotá que en vez de dar continuidad a los estudios del metro para una metrópoli de casi diez millones de habitantes como es la capital del país, engavetó los estudios del sistema subterráneo y se la jugó por llenar de buses y terminales la ciudad. Satisfacía así el meganegocio de los monopolios del transporte y los neumáticos y contribuía a romper la arquitectura vial de la ciudad. Además, enamorado del cemento, convirtió parques llenos de frondosos árboles en plazas de adoquines y piedras. Hace parte de la rancia oligarquía santafereña que se cree de “mejor familia” y posa de adalid de la anticorrupción. Pero eso sí, ante la falta de seguidores y de voluntad política, en vez de recoger firmas para inscribir su candidatura, recurrió a otro de los partidos politiqueros y clientelistas más desprestigiados del país, el Partido de la U. Ahí le quedó la coherencia… Del discurso a los hechos hay mucho trecho. Hace parte de la Coalición Equipo por Colombia, en la que guardó total silencio frente a las graves denuncias formuladas por Aída Merlano contra su compañero de alianza, Alejandro Char. Peñalosa es otro político de la élite que mangonea al país que llega al final de su carrera política untado de lo que tanto criticaba.

PÉREZ, LUIS (70 años). Alcalde de Medellín en 2002, cuando se llevó a cabo por parte del gobierno de Álvaro Uribe la nefasta Operación Orión en la Comuna 13 de Medellín, que derivó en una masacre y en violación masiva de derechos humanos, hechos que permanecen en la impunidad. Pérez hace parte de las viejas estructuras politiqueras y clientelistas del Partido Liberal que se han turnado los mandatos con otros toldos de la oligarquía tradicional, sin afectar el mangoneo del uribismo en Medellín y en Antioquia, departamento del cual Pérez fue también gobernador. Además, siempre ha fungido como mandadero de César Gaviria Trujillo, el jefe del viejo liberalismo. Inscribió su candidatura por firmas.

PETRO, GUSTAVO (61 años). Luchador contra el paramilitarismo y la corrupción en Colombia. A él se debe, en gran medida, el destape en el Congreso de la República, cuando fue representante a la Cámara, de las más importantes denuncias por la connivencia de políticos, agentes del Estado y Álvaro Uribe con el paramilitarismo. Son memorables sus debates sobre estos fenómenos, especialmente el del caso de Eudaldo Díaz, alcalde de El Roble, Sucre (perteneciente al movimiento Vía Alterna, el movimiento político de Petro en la época), asesinado luego de que denunciara en un consejo comunitario presidido por Uribe las amenazas recibidas de los paramilitares de la zona. Otro caso memorable es el de sus denuncias contra el Cartel de la Contratación en Bogotá. Economista, amplio conocedor y difusor de la historia de Colombia, la que explica en las plazas que colma con multitudes, Petro formula propuestas audaces, innovadoras en procura de su objetivo estratégico: que Colombia sea potencia mundial de la vida, lo cual implica descarbonizar la economía, frenar la dependencia del petróleo, conservar el medio ambiente y efectuar reformas fundamentales en salud, educación y empleo, para lo cual se la jugó con listas cerradas al Congreso en todo el país, pues solo con mayoría en el Legislativo podría llevar adelante sus iniciativas. Llama la atención su propuesta de construcción de una gigantesca red férrea para unir a Buenaventura con los puertos del Atlántico, y su ataque frontal al hambre que ensombrece hoy la coyuntura de Colombia. Se le critica su acercamiento con personajes de la política liberal como César Gaviria y sus desenfoques en la caracterización negativa de los procesos políticos de la República Bolivariana de Venezuela y de Nicaragua, aunque ha anticipado que en su mandato reanudará relaciones con la patria de Bolívar. Sus denuncias sobre el robo por parte del títere de EE.UU. Juan Guaidó de la empresa Monómeros Colombo-Venezolanos, regalada por Iván Duque al agente del imperio gringo en desarrollo de la nefasta política exterior del régimen uribista, ha sido esclarecedora. Petro lidera todas las encuestas, empezando por las de su Coalición Pacto Histórico. Se inscribió con el aval de Colombia Humana-UP.

ROBLEDO, JORGE (72 años). Durante varios períodos, congresista del Moir, un partido de origen maoísta que nació en 1960 y que a lo largo de los tiempos se ha ido desplazando hacia la centro-derecha y se ha caracterizado por su obsesión de dividir todo espacio político en el que participa. Así ocurrió en los años setenta del Siglo XX con la Unión Nacional de Oposición, UNO, y con la Confederación Sindical de Trabajadores de Colombia, Cstc, organizaciones a las que dividió con encono, comportamiento que se refleja en la actualidad como su sino histórico. Robledo fue elegido congresista en representación del Polo Democrático Alternativo, federación de partidos y grupos de izquierda y de centro fundado en 2005 que fue escindido por petición, de nuevo, del Moir, que procedió a fundar el partido Dignidad, con el aval del cual Robledo inscribió su precandidatura en la Coalición Centro Esperanza. La división, pues, ha sido la norma de conducta de este extraño agrupamiento que antes se creía de izquierda, y ahora se limita a defender al empresariado nacional y a cuestionar los TLC, abriendo espacio a algunas pocas figuras de lo que denominan “la burguesía nacional” con las cuales diseña alianzas, que presenta como si fueran pomposos frentes amplios. Recientemente, Robledo sorprendió respondiendo en un debate televisivo que en Colombia si había democracia. Olvidó el congresista los más de 80 jóvenes asesinados por la represión ordenada por el régimen de Iván Duque en el Paro Nacional, o los 6.402 falsos positivos (crímenes de Estado) cometidos por el régimen uribista, o la protuberante antidemocracia derivada de la corrupción electoral que llevó al gobierno a Duque, y un largo rosario de ejemplos. Todo indica que las elecciones del 13 de marzo marcarán un punto de inflexión para Robledo y su grupo, el otrora Movimiento Obrero Independiente y Revolucionario, Moir.  

RODRÍGUEZ, JHON MILTON (52 años). Aunque su candidatura fue revocada por un fallo del Consejo Nacional Electoral, luego de demanda interpuesta por un directivo del partido Colombia Justa Libres, quien argumentó procedimientos antidemocráticos en su escogencia, Rodríguez ha insistido en que su aspiración presidencial continúa. Es uno de los candidatos cristianos de extrema derecha en esta lid electoral. Su trabajo legislativo no se conoce y siempre ha estado del lado del régimen de Iván Duque. Fue de los senadores que respaldó la brutal represión del gobierno contra los manifestantes en el Paro Nacional de 2021 al negar la moción de censura al Ministro del Interior, una decisión que fue repudiada por la juventud del barrio Siloé en Cali, uno de los más golpeados por las actuaciones del gobierno entre abril y junio del año pasado. En redes circularon de manera profusa las expresiones de rechazo de jóvenes cuando Rodríguez estuvo en ese barrio haciendo proselitismo, ante lo cual fue increpado y expulsado del sector. No participa de ninguna coalición.

ROMERO, CAMILO (45 años). Recordado por haber impulsado en Cali, en su época de estudiante de la Universidad Autónoma de Occidente, el movimiento contestatario Tienen Huevo, y por haber liderado tal vez las únicas protestas de alumnos de esa institución privada en Cali levantando reivindicaciones estudiantiles en la década de los años noventa y principios de dos mil. Fue uno de los primeros periodistas colombianos en hacer parte del cuerpo de redactores del Canal Multiestatal Telesur, con sede central en Caracas, donde orientó su Unidad Investigativa en 2006. Fue también gobernador del departamento de Nariño. En el marco de la Coalición Pacto Histórico se ha destacado por el énfasis en los asuntos relacionados con el medio ambiente y la defensa de los animales. Llegó con el aval de Verdes por el Cambio.

SAADE, ALFREDO. Representante de un sector importante de la población, el de los cristianos, y quien contribuye también a dejar en evidencia dentro de la Coalición Pacto Histórico la participación de la diversidad en materia de creencias. Saade ha sorprendido porque, aunque muchas de sus concepciones no compaginan con las que profesa la mayoría dentro del Pacto (en relación con asuntos como el aborto, la eutanasia, la creencia en un ser superior, el matrimonio entre parejas del mismo sexo, la adopción monoparental, etc.), se ha ganado el respeto de sus competidores intra coalición y ha aportado en los debates en la perspectiva de la pluralidad conceptual, con una identidad estratégica: la lucha por el cambio de sociedad. Saade se inscribió con el aval de Alianza Democrática Amplia, ADA, y en su lucha política impulsa el Movimiento Cristiano Progresista Levántate.

URIANA, ARELIS (46 años). Una de las pocas mujeres en la campaña presidencial, representa a las comunidades indígenas, pues pertenece al pueblo wayú, en el marco de la diversidad que caracteriza a la Coalición Pacto Histórico. Fue inscrita con el aval del Movimiento Alternativo Indígena y Social, Mais. En los debates ha puesto de relieve la terrible discriminación a la que el Estado colombiano somete a las comunidades originarias, de manera especial las del departamento de La Guajira, de donde ella es oriunda.

ZULUAGA, ÓSCAR IVÁN (63 años). Disminuido personaje de reciclaje del uribismo, en la lid por la presidencia desde 2014, fracasado en su candidatura frente a Juan Manuel Santos. Aspirante de la extrema derecha que se ganó la candidatura del denominado Centro Democrático en una muy cuestionada encuesta, elaborada luego de que en la Coalición Equipo por Colombia lo rechazaron, no porque no se identifiquen con sus tesis neoliberales, sino por oportunismo electoral, ante el enorme desprestigio del expresidente de los falsos positivos, jefe de Zuluaga. En realidad, el pobre Zuluaga no es más que un fusible que seguramente se fundirá en los procesos de negociación entre los partidos de la derecha en la búsqueda de enfrentar a Gustavo Petro. Además, aunque lo absolvieron, la sombra de Odebrecht no lo abandona.

Cali, viernes 11 de marzo de 2022.

PERIODISMO LIBRE, CALI

martes, 8 de marzo de 2022

martes, 1 de marzo de 2022

La operación militar de Rusia y la hipocresía en Occidente

EE.UU., LA OTAN Y EL RÉGIMEN NEONAZI DE KIEV, CULPABLES DE LA CRISIS EN UCRANIA

Por Luis Alfonso Mena S.

La sumisión frente al imperio gringo y su maquinaria mediática mundial lleva a muchos a repetir, sin ninguna crítica, la narrativa de las potencias occidentales sobre lo que ocurre en Ucrania.

En realidad, lo que hace Rusia es proteger su territorio ante la amenaza nuclear diseminada a lo largo de países europeos integrados en la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Otan, y neutralizar, con operaciones especiales focalizadas, la infraestructura militar ucraniana establecida en centenares de bases militares repletas de toneladas del armamento surtido por el Pentágono y el Reino Unido.

En suma, decirle “basta” a la expansión del bloque agresivo de la Otan, cuyo jefe, EE.UU., se halla sediento de dólares para la industria militar norteamericana y afectado por una crisis económica de magnitud insospechada.

Además, y no menos importante, Rusia acude en ayuda de las repúblicas populares democráticas de Donetsk y Lugansk, independizadas de Kiev y situadas en la región oriental de Donbass, cuya población lleva ocho años siendo masacrada por el régimen neonazi instalado en el poder en Ucrania luego del golpe de Estado de 2014, que derrocó a Víctor Yanukóvich, golpe largamente patrocinado por la CIA y las potencias occidentales, con la participación de escuadrones paramilitares fascistas ucranianos.

La operación rusa en respaldo a las dos repúblicas autónomas, reconocidas por el presidente Vladimir Putin el lunes 21 de febrero, fue recibida con beneplácito por la población que la esperaba hacía años luego de padecer la persecución política y la violación de los derechos humanos, sociales y económicos del gobierno de Petro Poroshenko, surgido del golpe fascista, y del actual presidente, Volodimir Zelensky, un comediante de televisión convertido en “jefe de Estado” en el marco del régimen de extrema derecha imperante, pero, en realidad, un  títere de EE.UU. y del Reino Unido.

Los sufrimientos de los cuatro millones de pobladores de la región del Donbass, cuyo idioma es el ruso, lo mismo que su idiosincrasia, cultura, tradiciones y sentimientos, han sido indecibles y condujeron a la independencia frente al poder central de Ucrania. Además, los habitantes de esta región se niegan a ser incorporados a la Otan y a la Unión Europea.

Más de 14.000 personas asesinadas, bombardeos y ataques diarios a manos del régimen y del llamado Batallón Azov (una agrupación nazi-fascista integrada por supremacistas blancos locales y de otros países incorporados al Ejército y al Ministerio del Interior ucranianos), la pérdida de sus pensiones, la ilegalización de la lengua rusa (¡qué tal esto!) y un sinnúmero de medidas han lacerado el alma y los cuerpos de millones de residentes de Lugansk y Donetsk.

El testimonio de Luis Hernando Muñoz, ciudadano colombiano residenciado en Donetsk desde hace 36 años, ha resultado impactante por la claridad de lo que realmente ocurre allí y el martirio que les ha tocado soportar durante ocho años. Se trata de un documento televisivo que dejó pasmados a los periodistas de Caracol, que cuando lo contactaron seguramente no se imaginaban la historia que se iba a revelar sobre la realidad de la sufrida región.

Por todo ello, Rusia plantea la desmilitarización y desnazificación de Ucrania, donde el régimen instaurado en 2014 reivindica políticos colaboracionistas de los ejércitos de Adolfo Hitler durante la Segunda Guerra Mundial, como Stepan Bandera, en cuyo homenaje el Parlamento de ese país decretó el 1 de enero, fecha de nacimiento del pro nazi, como día nacional.

Y donde proliferan agrupaciones de extrema derecha que glorifican, con el patrocinio del gobierno y de EE.UU., el nazismo, derrotar al cual costó la vida de más de veinte millones de soviético en la que se bautizó históricamente como la Gran Guerra Patria (1939-1945), legado traicionado por muchos hoy en Ucrania.

El objetivo de las potencias de Occidente, pues, es inundar de misiles de largo alcance la frontera con Rusia utilizando a Ucrania, pero para ello es indispensable hacerla miembro de la Otan.

Lo que está exigiendo Rusia de manera rotunda desde hace años, y que ha sido sistemáticamente desconocido por EE.UU., el Reino Unido y la Otan en general, es que se desista de esa iniciativa, que está en la estrategia de seguir desenterrando la anacrónica Guerra Fría surgida en 1949.

Para el gobierno ruso convertir a Ucrania en la plataforma de misiles nucleares, que en cinco minutos estarían impactando en Moscú, se constituye en asunto de supervivencia de su pueblo y su territorio, y de ahí su rechazo a la Otan. No es un invento de última hora de Putin.

Un hecho más: en 2014, la igualmente mayoritaria población rusa de la península de Crimea decretó, mediante referéndum, su separación de Ucrania y su regreso a jurisdicción de Rusia: el 95% de los participantes en la consulta votó por esa opción, lo cual exacerbó aún más a los nacionalistas de la ultraderecha de Kiev.

 Moscú reclama, en el marco de los diálogos en marcha en Bielorrusia con Ucrania, el reconocimiento de Crimea como parte de la geografía rusa.

LAS POSICIONES LIGHT

 Ante este panorama complejo, sectores de la izquierda light y el progresismo liberal socialdemócrata en Latinoamérica hoy se acomodan y se suman a las sirenas de condenas occidentales a Rusia, sin ninguna contextualización histórica y geopolítica, porque creen que asumir esa condena suma votos, ambienta gobernabilidad o, por lo menos, neutraliza los rayos de las derechas.

Medios de comunicación que se reclaman “independientes” y hasta “alternativos” asumen, igualmente, el discurso de las grandes corporaciones comunicacionales de los países de la Otan, repiten sus líneas discursivas al pie de la letra y se prestan para reproducir imágenes claramente manipuladas del lado de la maquinaria de la guerra de desinformación.

Pero una de las posiciones más absurdas de los denominados progresistas es la de Gabriel Boric, el presidente electo de Chile, quien llamó a apoyar incondicionalmente el régimen neonazi de Ucrania, olvidando los tormentos de su pueblo en la Chile de 1973, torturado y masacrado por la dictadura fascista de Pinochet. ¡Qué contradictorio, que doloroso!

En esta época de ignorancias, “olvidos” y claudicaciones muchos no recuerdan, o nunca han denunciado, que los gobiernos surgidos en Ucrania después del golpe de Estado de 2014 ilegalizaron la lengua rusa que hablan millones de personas, especialmente en el este (región de Donbass), acabaron con las pensiones de trabajadores, encarcelaron a miles de opositores y sometieron al hambre y a los bombardeos cotidianos a millones de personas habitantes de las ahora repúblicas independientes de Donetsk y Lugansk.

Y, menos, recuerdan episodios tan terribles como la espantosa cacería de obreros desatada por las hordas nazis en 2014 que concluyó con el brutal asesinato de 50 jóvenes y trabajadores comunistas en la ya tristemente célebre masacre a la Casa de los Sindicatos de Odessa, incendiada con la gente en su interior.

Quienes hoy asumen el discurso de EE.UU. sobre el operativo ruso en Ucrania no recuerdan la actual infame guerra de los jeques árabes contra el pueblo de Yemen, la destrucción imperialista desatada en Libia, la brutal guerra de EE.UU. y otras potencias contra el pueblo sirio, las invasiones gringas a Irak y Afganistán.

Tampoco recuerdan (o se hacen los amnésicos) el despedazamiento por parte de la Otan de la antigua Yugoslavia en siete trozos, para lo que fueron necesarios 78 días incendiando Belgrado y otras ciudades de la patria de Tito, contra las que lanzaron 2.300 misiles, 14.000 bombas y 15 toneladas de uranio empobrecido que generaron una crisis ambiental del horror.

Los que hoy lanzan alaridos hipócritas sobre Rusia, callan ante los bombardeos diarios del régimen nazi-sionista de Israel, patrocinado por EE.UU., contra el pueblo palestino en su lacerado, invadido y dividido territorio (Gaza y Cisjordania), que dejan miles de víctimas. ¡Cinismo sin límites!

Tampoco recuerdan las invasiones a Panamá, Granada, República Dominicana y tantas otras agresiones atroces acometidas por el imperio estadounidense en nuestro continente americano… Ni hablan de la guerra de las Malvinas, en la que el imperio inglés asesinó a centenares de argentinos para mantener la posesión del territorio invadido. 

Y, desde luego, no se atreven a denunciar los terribles bloqueos económicos e intentos de invasión contra Cuba, la República Bolivariana de Venezuela y Nicaragua, tres países solidarios en estos momentos decisivos con Rusia, al lado de la República Popular China y de Bielorrusia.

Para rematar, nos encontramos un artículo de Camilo González Posso (“Se escala la guerra imperial de reparto entre potencias capitalistas”), en la misma tónica de los centristas tan de moda hoy.

En principio lo que plantea González es la no alineación, es decir, tratar por igual a la Otan y su política hegemónica, y a Rusia, a la que se busca aislar. González reivindica a Henry Kissinger, quien, entre otras cosas, habla de rechazo a la anexión rusa de Crimea, con lo cual el articulista desconoce el referéndum de 2014 en el que, como mencionamos arriba, la población decidió su retorno a Rusia (Crimea fue “obsequiada” por Nikita Jruschov a Ucrania en 1954). Y ni una palabra sobre las masacres y limpieza étnica del régimen de Kiev contra las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. González remata con el viejo argumento de no meterle ideología a esto. El discurso “profesional”.

LA PROVOCACIÓN DEL FANTOCHE

Y mientras tanto, el régimen fantoche de Iván Duque, haciendo ejercicios con submarinos nucleares de EE.UU. en el océano Atlántico con la Armada gringa, otro acto de provocación contra Venezuela, como tantos que desde Colombia se han emprendido por los que usurpan el poder hoy en la Casa de Nariño y que tienen el cinismo ahora de hablar de invasiones e intervencionismo.

Ocultan que desde La Guajira colombiana se inició la nefasta Operación Gedeón, derrotada por Venezuela en las costas de la Guaira en mayo de 2020, y el circo en los puentes de norte de Santander para invadir, en febrero de 2019, a la hermana república con camiones de supuesta “ayuda humanitaria” y centenares de guarimberos armados con el auspicio de la Policía de Duque.

Que la Rusia de hoy no es socialista, sino un país que regresó al capitalismo, luego de la disolución de la Unión Soviética en 1991, se sabe. Pero eso no significa que, en el marco de las contradicciones del mundo capitalista de hoy, tengamos que desconocer asuntos fácticos denunciados por Moscú, empezando por la amenaza nuclear contra el pueblo ruso y la tragedia de ocho años en el Donbass.

Por el contrario, si algo está logrando esta crisis es que se empiezan a divulgar por el mundo estos hechos sobre los que la dictadura mediática internacional ha callado, y a pesar de la censura que los muy “democráticos” gobiernos de la Otan han impuesto para silenciar a medios como RT, Sputnik y otros. Cuando no hay argumentos, se recurre a amordazar la voz del mensajero. Y a producir un rosario de “sanciones” económicas, diplomáticas y de todo tipo, hasta deportivas, como las de la mafia de la Fifa.

Los agresores no son ni el pueblo ni el gobierno rusos, son la Otan, EE.UU. el Reino Unido y demás potencias occidentales y su títere, el régimen neo-nazi de Ucrania. Rusia y las repúblicas autónomas de la región de Donbass (Donetsk y Lugansk) se defienden.

Como dijera el analista chileno Alejandro Kirk, Rusia no cometerá el error de la Urss en 1939 de “intentar apaciguar al agresor con concesiones”. Moscú sabe que el régimen de Kiev es símbolo de arbitrariedad y cobardía. Ante la amenaza del bloque guerrerista de la Otan, Rusia tenía un dilema: se protege o claudica. Ya saben cuál es la respuesta.

Cali, Colombia, martes 1 de marzo de 2022.

*PERIODISMO LIBRE, CALI*