miércoles, 22 de diciembre de 2021

La Entrevista, en Periodismo Libre


"PETRO PUEDE SER PRESIDENTE SI LOGRA HACER ALIANZAS MÁS ALLÁ DEL PACTO HISTÓRICO": JULIÁN LEMOS

Luis Alfonso Mena S. entrevista a Julián Lemos Idrobo, analista político, exdirigente sindical y estudiantil de los años setenta, sobre la coyuntura social y política en Colombia, las históricas luchas populares de 2021 y las perspectivas de la confrontación electoral en 2022.

Periodismo Libre, Cali.

Martes 21 de diciembre de 2021.

martes, 23 de noviembre de 2021

jueves, 11 de noviembre de 2021

En el programa Detrás de la Razón, de Hispan TV


“MOLANO ES EL MUÑECO DEL VINTRILOCUO DUQUE CONTRA EL NOBLE PUEBLO IRANÍ”: LUIS ALFONSO MENA S.

Hoy estuvimos junto al periodista Luis Alfonso Mena en el programa #DetrásDeLaRazón de #Hispantv conducido por Danny Pérez Díaz, analizando las implicaciones de las declaraciones del Ministro de la Defensa de Colombia contra Irán.

Miércoles 10 de noviembre de 2021.

sábado, 16 de octubre de 2021

La dolorosa partida de un amigo

Álvaro Hernán Sierra Sierra, 1951-2021.
ALVARO SIERRA, EL COMPAÑERO EJEMPLAR

Por Luis Alfonso Mena S.

En Cali, este sábado 16 de octubre de 2021, a las 2 y 50 de la tarde, partió a la Eternidad el querido amigo y compañero de lucha Álvaro Hernán Sierra.

Había nacido el 24 de febrero de 1951 en el municipio de San Jerónimo, departamento de Antioquia.

Líder político vinculado durante mucho tiempo a la Juventud Comunista y al Partido Comunista Colombiano, Regional del Valle del Cauca.

Licenciado en ciencias sociales y en filosofía, especialista en derechos humanos, docente universitario, dirigente del magisterio vallecaucano.

Querido Álvaro: gracias por tu ejemplo de honestidad y de entrega a los más altos valores de la solidaridad humana.

Gracias por tu fidelidad a la causa de los pueblos del mundo, por tu sin igual lucha por los más débiles, los humildes y los pobres de esta sociedad.

Seguirás siempre presente en el ideario de todos los hombres y mujeres que conocimos de tu bondad, de tu disciplina, de tu perseverancia.

Marchas en paz, querido Álvaro, dejando un legado inmenso de amor por tu gente, por el pueblo y sus más preciados propósitos.

Fuiste nuestro líder de juventud, nuestro compañero en la búsqueda de la justicia y del saber, nuestro amigo en los días de la cotidianidad.

Siempre recordaremos que estuviste entre los primeros en alistarte en el impulso de los proyectos de comunicación alternativa, como Periodismo Libre.

En este doloroso momento, va mi mensaje fraterno de solidaridad y aprecio para toda su querida familia, sus colegas profesores y sus compañeros de lucha social y política.

Luego de batallar como el guerrero que fuiste siempre por la vida, te nos has adelantado, pero has dejado un camino pletórico de ejemplo.

Vivirás por siempre en nuestras luchas y en nuestro ideario, querido hermano.

Jamundí, sábado 16 de octubre de 2021.


El querido amigo Álvaro Hernán Sierra, el domingo 18 de julio de 2021, cuando con él compartimos en su hogar el libro La Historia de un Sindicato del Pueblo.

martes, 5 de octubre de 2021

Los cuatro reportajes de la serie de Periodismo Libre Cali y Telesur


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE

Presentamos a continuación, reunidos, los cuatro reportajes de la serie Colombia: Memorias de la Barbarie, realizada por Luis Alfonso Mena S., director de Periodismo Libre Cali, para el canal internacional Telesur.

Setenta y cuatro testimonios congregados en cuatro reportajes que documentan el genocidio cometido contra el pueblo colombiano desde el 28 de abril de 2021 y durante tres meses por el gobierno de Iván Duque.

Que el mundo lo sepa.

Primer reportaje.
LAS VÍCTIMAS DE LA REPRESIÓN

En este capítulo nos hablan los familiares de quienes fueron asesinados por la policía de Colombia durante el Paro Nacional que inició el 28 de abril de 2021. Víctimas de la represión y la violencia del gobierno de Iván Duque.

Emitido el sábado 11 de septiembre de 2021 por Telesur.

 

COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE

Segundo reportaje.
TORTURADOS Y VIOLENTADOS

En este capítulo hablan los heridos y torturados por el régimen de Iván Duque en la brutal represión desatada contra los participantes en el Paro Nacional, que inició el 28 de abril de 2021.

Emitido el sábado 18 de septiembre de 2021 por Telesur.


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE

Tercer reportaje.
SED DE VENGANZA CONTRA LA PROTESTA

En este capítulo hablan los perseguidos y víctimas de los falsos positivos judiciales del régimen de Iván Duque contra los participantes en el Paro Nacional, que se inició el 28 de abril de 2021.

Emitido el sábado 25 de septiembre de 2021 por Telesur.


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE

Cuarto reportaje.
LA RESISTENCIA POPULAR

En este capítulo hablan hombres y mujeres del suroccidente colombiano, quienes cuentan sus experiencias de resistencia popular en el Paro Nacional, que se inició el 28 de abril de 2021.

Emitido el sábado 2 de octubre de 2021 por Telesur.

Entrevistas, texto y narración: Luis Alfonso Mena S.
Cámara, edición y montaje: William Moreno López.
Transporte: Boris Moreno.

UNA SERIE DE TELESUR Y PERIODISMO LIBRE CALI.

Videos reunidos el martes 5 de octubre de 2021.

domingo, 3 de octubre de 2021

Serie de reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali (IV)


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE. La resistencia popular

En este capítulo hablan líderes de las experiencias de resistencia popular en el Paro Nacional, que se inició el 28 de abril de 2021.

Entrevistas, texto y narración: Luis Alfonso Mena S.
Cámara, edición y montaje: William Moreno López.
Transporte: Boris Moreno.

UN REPORTAJE DE PERIODISMO LIBRE CALI Y TELESUR.

Emitido el 2 de octubre de 2021 por el canal Telesur.

domingo, 26 de septiembre de 2021

Serie de reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali (III)


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE. SED DE VENGANZA CONTRA LA PROTESTA

En este capítulo hablan los perseguidos y víctimas de los falsos positivos judiciales del régimen genocida de Iván Duque contra los participantes en el Paro Nacional que se inició el 28 de abril de 2021.

Entrevistas, texto y narración: Luis Alfonso Mena S.
Cámara, edición y montaje: William Moreno López.
Transporte: Boris Moreno.

UN REPORTAJE DE PERIODISMO LIBRE CALI Y TELESUR.

Emitido el 25 de septiembre de 2021 por el canal Telesur.

domingo, 19 de septiembre de 2021

Serie de reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali (II)


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE. TORTURADOS Y VIOLENTADOS

Serie de cuatro reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali.

En este capítulo nos hablan los heridos y torturados por el régimen genocida de Iván Duque durante el Paro Nacional que inició el 28 de abril de 2021.

Entrevistas, texto y narración: Luis Alfonso Mena S.
Cámara, edición y montaje: William Moreno López
Transporte: Boris Moreno

domingo, 12 de septiembre de 2021

Serie de reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali (I)


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE. LAS VÍCTIMAS DE LA REPRESIÓN

En este capítulo nos hablan los familiares de quienes fueron asesinados por la policía de Colombia durante el Paro Nacional que inició el 28 de abril de 2021. Víctimas de la represión y la violencia del gobierno de Iván Duque.

Entrevistas, texto y narración: Luis Alfonso Mena S.
Cámara, edición y montaje: William Moreno López
Transporte: Boris Moreno

viernes, 10 de septiembre de 2021

Desde este sábado 11 de septiembre


COLOMBIA: MEMORIAS DE LA BARBARIE. LAS VÍCTIMAS DE LA REPRESIÓN

Desde este sábado 11 de septiembre, a las 8:00 p.m., hora de Colombia, por Telesur.

También se puede acceder en directo al canal Telesur su página electrónica (https://www.telesurtv.net/) y por YouTube.

Serie de cuatro reportajes de Telesur y Periodismo Libre Cali, dirigida por Luis Alfonso Mena S.

Los sábados, de 8:00 p.m. a 8:30 p.m.

jueves, 9 de septiembre de 2021

Periodismo Libre, Cali


“NO PERMITIREMOS QUE LOS CRÍMENES DE DUQUE CONTRA LA JUVENTUD COLOMBIANA QUEDEN EN LA IMPUNIDAD”: LUIS ALFONSO MENA S.

Palabras de Luis Alfonso Mena S., editor de Periodismo Libre, en el acto de conmemoración del Día Internacional del Periodista, cumplido en el Boulevard del Río Cali, el miércoles 8 de septiembre de 2021, organizado por la Corporación de Periodistas del Valle del Cauca, Cpvc. 

jueves, 5 de agosto de 2021

Memorias de la Barbarie (IV). Testimonio de Sidssy, hermana de Lucas Villa

Con la misma alegría que reflejó siempre su hermano Lucas, Sidssy nos habló en Pereira de su vida de familia y de su lucha social. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).

 “QUE LUCAS SEA RECUERDO INDELEBLE EN LOS COLOMBIANOS”

Por Luis Alfonso Mena S.

Colombia necesita memoria para que los 80 asesinatos cometidos por la represión del gobierno de Iván Duque contra manifestantes en el Paro Nacional no queden en la impunidad, nos dijo Sidssy Uribe Vázquez con la imagen de su hermano al fondo, en un mural que reclama libertad, lleno de vida, de manos y de flores multicolores, pintado en la Facultad de Medicina de la Universidad Tecnológica de Pereira.

“Quiero que sea un recuerdo indeleble en los ciudadanos”, añadió refiriéndose a Lucas, convertido en símbolo de la resistencia contra la barbarie estatal desde el 5 de mayo, cuando paramilitares lo acribillaron a balazos, cobardemente emboscados en la oscuridad de la noche en el Viaducto de Pereira. “Lucas Villa representa a la comunidad universitaria, al pueblo colombiano, un pueblo que canta, que baila, que se ríe de lo bueno y de lo malo. Lucas era esa representación de lo que es Colombia”, nos explicó.

Tras el atentado, en el que recibió ocho impactos de arma de fuego, Lucas siguió resistiendo, con perseverancia, con el esfuerzo que siempre lo caracterizó en la vida, esta vez contra la muerte, pero falleció cinco días después. Sin embargo, su ejemplo de lucha quedó sembrado entre miles y miles de jóvenes que lo acogen hoy como uno de sus referentes éticos contra la desigualdad, la injusticia, la opresión, la segregación y la violencia de las clases dirigentes.

“A los 37 años descubrió que la manera de tocar el alma de las personas era a través del físico, porque el físico es la expresión del alma, del espíritu”, nos dice Sidssy, con admiración por el hermano que partió y que se refleja en su mirada.

“Supe que muy probablemente a él le estaban haciendo un seguimiento debido a que era una persona que no se quedaba callada, que hablaba, que difundía", recuerda, y luego asegura que la violencia ejercida por el régimen de Duque contra la juventud “es una estrategia de terror que siempre manejan este tipo de gobiernos autoritarios”.

“Se hacen los de los oídos sordos para no acatar los reclamos de la ciudadanía, que está siendo asesinada por la misma mano negra del Gobierno”, subraya con firmeza. “Este es el momento de no olvidar para que podamos cambiar. No podemos seguir permitiendo que sigan abusando de nosotros unas cuantas familias que han permanecido en el poder”. He aquí el testimonio de Sidssy Uribe Vázquez.

El mural pintado en homenaje a la memoria de Lucas Villa, en la Facultad de Medicina de la Universidad Tecnológica de Pereira, UTP. (Foto: Luis Alfonso Mena S.). 

“LUCAS ERA UNA PERSONA LIBRE Y PERFECCIONISTA” 

–Sidssy: recuérdenos, por favor, cómo era su hermano: ¿cuáles eran sus utopías, sus luchas…?

–Mi hermano era una persona muy extrovertida, muy alegre. Se burlaba de la vida, cualquier acontecimiento lo tomaba muy jocosamente. Dentro de eso también era muy perfeccionista. Era una persona, además de libre, que no se limitaba por el qué dirán. Era muy perfeccionista. En todo lo que hacía buscaba siempre destacarse porque él consideraba que las cosas o se hacían bien o no se hacían, y para ello se tomaba su tiempo.

En la Universidad fue un estudiante destacado. Muchos dicen: ¿por qué estaba tan adulto en la Universidad? Él muere a los 37 años, pero porque él fue un explorador de la vida, él nunca quiso meterse a ciegas a nada, siempre quiso explorar y en el trasegar de su vida él encontró que a través del ejercicio, del esfuerzo físico, uno puede tocar el alma, porque él era un deportista innato, muy buen deportista, en todo lo que hiciera a nivel deportivo se destacaba, era muy bueno, muy hábil, era sensible, rápido, resistente.

En todo ese mar de conocimientos que fue adquiriendo en su vida, en su juventud, porque él también se fue a mochilear por Suramérica, a conocer culturas en Argentina, Brasil, Bolivia, él exploró. A los 37 años descubrió que la manera de tocar el alma de las personas era a través del físico, porque el físico es la expresión del alma, del espíritu.

Por ejemplo, como instructora de artes marciales, yo puedo conocer un alumno solamente por sus movimientos, puedo conocer la forma en que fue educado, la forma como piensa, y él también lo descubrió en su proceso de formación de vida. Llega el momento en que tiene que formalizarse y entonces entra a la carrera de Ciencias del Deporte y la Educación, a los 33 años.

–¿Cómo era la relación de Lucas con sus hermanos?

–Cundo éramos pequeñas era muy divertido, porque era muy creativo. Él hacía los típicos ‘bunkers’ con almohadas, él era el que nos empezaba a generar esa curiosidad por los espacios. Entonces teníamos un camarote y poníamos sábanas que separaban los cuartos y hacíamos bases y jugábamos con las almohadas a golpearnos, a jugar, a veces enjabonaba el piso y con sábanas nos deslizábamos, debajo del comedor también hacíamos base.

Él nos enseñó a montar bicicleta. Cuando tenía patineta, él nos montaba en ella y nos bajaba por lomas. Siempre buscó esos espacios con los hermanos, él nos compartía mucho esa diversión. Cogía muñecos y hacía títeres, era muy bueno. Nos hacía reír mucho.

A medida que fuimos creciendo empezó a tratar de formarnos, a pulirnos en nuestras debilidades. Por ejemplo, a mi hermano menor, Santiago. Este niñito era muy ‘lengüisopa”, y Lucas le decía “¡Hable bien, hable bien!”, y hoy mi hermano no tiene ese problemita de lenguaje por mi hermano Lucas. Por ejemplo, al comer nos decía que no lo hiciéramos con la boca abierta, era muy perfeccionista con todo, a todos se les dedicaba.

Ya más adultos, todos con sus temperamentos, empieza a ser un poquito más difícil, porque ya desde adolescente uno empieza a formar su propio carácter y había choques entre hermanos, que es lo más normal en la familia, pero lo que había más entre mi hermano y nosotros era que se preocupaba mucho por nosotros.

–¿Y Sidssy heredó entonces el perfeccionismo y el amor por el arte de Lucas?

–Tal vez el perfeccionismo mental. Me hubiera gustado ser tan perfeccionista como él. Yo soy pintora hoy porque yo vi a mi hermano dibujar cuando yo tenía siete años, un dibujo de él me gustó, y yo dije que quería dibujar como mi hermano. Desde entonces empecé a dibujar y en ese sentido soy empírica en el arte. Yo no he recibido clases de ningún tipo para aprender lo que hoy tengo como conocimiento, lo he aprendido en la marcha, pero fue a raíz de ver a mi hermano.

Es tanto así que soy instructora de artes marciales porque mi hermano me llevó una vez al grupo y estaban en el Parque Olaya dando clases de Kung-Fu Shaolin, y desde entonces no he salido, pero mi hermano si ha sido como una mariposita, de flor en flor en cada conocimiento que él recorrió. Pero a nivel espiritual, a nivel de corriente de creencias él se quedó en el taoísmo que se maneja acá en la ciudad, que es el taoísmo laoísmo, porque se trabaja mucho el cuerpo. Hay una cosa en esta corriente religiosa que son las runas, que no son las piedritas celtas, sino que son posturas físicas estáticas muy, muy difíciles de hacer, generan mucho desgaste y a él le gustó porque tocaba la parte espiritual, la conexión con la energía del padre sol, la madre tierra y la naturaleza.

–¿Cómo fueron esos días previos al Paro Nacional, y la vinculación de ustedes? ¿Cómo fueron esos días que antecedieron el día trágico del asesinato de Lucas?

–Personalmente yo me encontraba apartada de mi hermano por ese tiempo. Yo trabajo como instructora de artes marciales, entonces tenía que trabajar y en los tiempos que quedaban podía ir a marchar. Por esa época estaba lesionada de un dedo, entonces yo no podía caminar fuertemente, pero la energía estaba muy hostil en la ciudad, sobre todo cuando el alcalde Maya de la ciudad de Pereira, en un comunicado oficial, dice que recomienda o dictamina que tienen que hacerse frentes comunes para defender sus propiedades de los “vándalos”, porque al parecer era insuficiente la fuerza policial. Pero uno como ciudadano viendo eso sabe que era mandar a formar grupos paramilitares en la ciudad, grupos de defensa civil. Y también promovía que los vigilantes privados fueran parte de eso.

Cuando yo vi esa noticia, lo primero que pensé como ciudadana es que iba a haber muchos muertos a raíz de esa decisión y que iban a justificar los muertos como si fueran ciudadanos que estaban defendiendo su propiedad, cuando probablemente fueran estos mismos funcionarios públicos o, de pronto, personas de estos grupos que siempre han existido como las Águilas Negras, disfrazados de personas de civil, asesinando, para justificar y para generar terror. Eso lo sentí en ese instante. A los tres días asesinan a mi hermano.

¿Por qué no muere aquel día? Porque mi hermano era muy fuerte, mi hermano física y mentalmente era muy fuerte y por eso no muere, porque las heridas de bala que recibió cualquier otra persona no las resiste.

“Lucas Villa representa a la comunidad universitaria, al pueblo colombiano. Lucas era esa representación de lo que es Colombia”. (Foto: Luis Alfonso Mena S.). 

“A MI HERMANO LE ESTABAN HACIENDO UN SEGUIMIENTO”

–¿Cómo ocurrió el atentado?, ¿cómo fue su lucha posterior por seguir viviendo?

–El día del atentado a mí me llaman mis hermanos, porque son los primeros que llegan, porque se encontraban cerca del viaducto. Mi hermana Sol fue la primera que llegó porque estaba saliendo de la ciudad, iba hacia su casa y observó un video donde vio a mi hermano. Inmediatamente va hacia el Hospital, llama a mis hermanos, ellos nos comunican por el grupo de WhatsApp que a Lucas le dispararon. Yo les pregunto que en dónde, porque estaban disparando también en el barrio Cuba, en diferentes partes de la ciudad. Entonces, cuando confirman que fue en el viaducto, es un choque. Y después me doy cuenta de un video donde sale mi hermano justamente ese día comunicándole a la gente en un bus cuáles son las injusticias que tenemos como ciudadanos. Supe que muy probablemente a él le estaban haciendo un seguimiento debido a que era una persona que no se quedaba callada, que hablaba, que difundía.

Posteriormente, 30 o 40 minutos después, me llaman y me confirman que tiene muerte cerebral. Esa misma noche me dirijo a la Clínica, me despido de él y él fue extraño porque nos dicen que tiene muerte cerebral, pero no se muere. Cuando yo empiezo a despedirme de él, empiezo a recitar una parte del Libro Tibetano de los Muertos donde le digo que está en un proceso de transición, que tenía que despedirse de mi mamá, y que tenía que ser fuerte, porque había muchas personas que sabían de lo que le había pasado, que había tocado muchos corazones. Él empezó a mover el hombro y volteó los ojos porque quería levantarse.

Cuando llegamos a la Clínica, un familiar de él del lado paterno fue, y le dice a mi hermana que nos estaban recomendando que ya como tenía muerte cerebral, él era muy buen donador de órganos y estábamos en shock. Llamamos al papá, llamamos a mi mamá, el papá dijo que sí, pero mi mamá dijo que no, porque en las creencias de mi hermano él ni siquiera regalaba su ropa, no porque fuera mezquino, sino porque creía que su karma no debía compartirlo, que son cargas que no debía poner a otro a cargarlas, entonces mucho menos sus órganos. Eso permitió que le dieran 12 horas en la UCI y posterior a eso tuviera todos esos días de lucha contra la muerte.

–¿Qué siguió a esa lucha de Lucas durante varios días resistiendo? Porque también él resistió en la clínica.

–Él no llegó al quirófano. Nos dijeron que había que hacerle cirugías, pero, él hacía siete años había tenido un accidente en bicicleta donde se fracturó las primeras tres vértebras cervicales y le tuvieron que poner una platina. Cuando le disparan, la bala choca contra esa platina y no le toca médula, se le inflamó, pero no le tocó la médula. A él le dispararon en el oído también, pero no entró a la cabeza, no hubo ninguna bala que entrara en su cerebro.

El día 9 los internistas nos comunican que Lucas tenía un movimiento perezoso de la pupila, que había mordido dos veces el tubo y que había una posibilidad de que se le hiciera una traqueotomía y alimentarlo por el hígado, y que podría quedar con paraplejia o cuadriplejia, era una probabilidad pequeñita, pero la había, debido a esas reacciones que estaba teniendo. Entonces hubo como un espacio de esperanza en la familia al saber que estaba luchando, que estaba resistiendo y que seguía vivo a pesar de las heridas.

Pero al día siguiente llega un internista que se estaba esperando desde Cúcuta que no había podido llegar antes porque los bloqueos acá no le habían permitido movilizarse desde el primer día hacia la ciudad. Nosotros como familia no entendíamos porqué si había buenos internistas en la ciudad, estaban esperando a este ciudadano. El día que llega nos da un dictamen completamente diferente. Nos dice que no ha movido las pupilas, que siempre han estado dilatadas y nunca tuvo modificación sanguínea desde que llegó a la clínica. Eso nos ha dejado muchas dudas a nosotros como familia, mucha desazón, porque además de todo no nos dieron tiempo para que hubiera una segunda opinión médica para constatar.

“Supe que a él le estaban haciendo un seguimiento debido a que era una persona que no se quedaba callada, que hablaba, que difundía". (Foto: Luis Alfonso Mena S.).
“FUE UNA ESTRATEGIA DE TERROR”

–¿Cómo fue el atentado contra Lucas?, ¿lo perfilaron con algún elemento óptico?, ¿qué dijeron las autoridades de este ataque de civiles armados en la oscuridad?

–Aún es materia de investigación. La Fiscalía con el caso de mi hermano está siendo muy juiciosa. Llevan un avance bueno, han hecho una investigación bastante juiciosa, pero en este momento esa información es confidencial. Pero, digamos que basándonos en los videos de la ciudadanía, lo que ha salido a la opinión pública es un ataque sicarial que va de la mano también con el posterior asesinato de un vigilante a los dos días. Como ciudadanos consideramos que es una estrategia de terror que siempre manejan este tipo de gobiernos autoritarios.  Cuando vino la Comisión de la Verdad, comenzó una hora después de la hora pactada. Las víctimas hablamos y no había llegado el alcalde de Pereira. Cuando nos fuimos las víctimas, el alcalde llega media hora después. Hasta ahora el alcalde no le ha dado la cara a las víctimas por las decisiones que él determinó y que propiciaron la muerte de mi hermano Lucas Villa y de Héctor Fabio Morales.

–¿Y Héctor Fabio también participaba en la protesta?

–Sí, él era marchante como todos. Él iba a marchar, si tenía la posibilidad de ayudar a alguien lo hacía. Justamente por eso lo confundieron con los enfermeros, porque era un muchacho que participaba y era muy acomedido.

–La Fiscalía investiga, pero los dolientes también lo hacen. ¿Qué han podido detectar ustedes en relación con quiénes están detrás de este crimen, que ocurre en una coyuntura de aparición sujetos civiles armados, muchos de los cuales han estado respaldados por la Policía, como se vio en Cali, por ejemplo?

–Se sabe que hay conversaciones entre empresarios de la ciudad de Pereira donde también se recibe un apoyo por parte de la Policía con esta decisión que toma el alcalde. El día de los hechos no llega el CTI. El día de los hechos, con más o menos cinco CAI entre 150 y 200 metros de distancia (hay uno abajo del viaducto al que tú llegas en tres minutos en una moto, y, además, siendo Policía, te abren paso) nadie llegó.

Había una ambulancia en la zona, y no fue la ambulancia la que recogió a mi hermano, fue un carro particular. Normalmente hay un CAI móvil allí y ese día no estaba, no había acompañamiento policial. 


“Este es el momento de no olvidar, para que podamos cambiar": Sidssy Uribe Vásquez, en la UTP. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).

“LA CIUDADANÍA ES ASESINADA POR LA MANO NEGRA DEL GOBIERNO”

–Y había penumbras…

–¿Y quién había ordenado apagar las luces en el viaducto? Y luego, posterior al atentado, vuelven las luces. Justamente en todo el frente donde ocurrieron los hechos hay una cámara que no funcionó esa noche. Una de más o menos cinco que hay a la redonda, porque de los lugares privados también, pero esa que es pública no tenía energía porque el viaducto no tenía. Hubo innumerables videos de seguimiento a mi hermano ese día. Una cosa es que salga uno, pero ese día hubo muchos. Nosotros pensamos que eso hace parte también de un seguimiento que se le hizo a mi hermano, una estrategia para mostrarle a la ciudadanía que esta persona que es tan alegre, que es tan pacífica, también muere. Por eso, días después la gente no salió con la misma intensidad.

–Se cumplió un objetivo de los represores contra el Paro que era generar terror…

–En vista de esos pocos factores que hubo, uno dice, bueno, no estaba la Policía, no estaban las autoridades, permitieron que todo ocurriera, permitieron que las pruebas se perdieran, ¿entonces uno qué piensa?

–¿Y el alcalde jamás se ha referido a este caso?

–Sí, pero se ha referido más como tirando hacia lo que siempre dicen de investigar, de encontrar los culpables del hecho, pero que haya buscado acercarse a la familia por lo menos con nosotros, no. Él dice que se acercó a la familia, pero es que mi hermano tiene un núcleo familiar y una familia con la que nunca ha estado, con la que nunca vivió la mayor parte de su vida, con ellos si se comunicó el alcalde, pero con la familia de él, con la familia que vivió, con la familia que creció, con la que tuvo que aprender, con nosotros, no.

–¿Qué les dijo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos?

–Solo escucharon, que es lo más importante, porque ni siquiera las autoridades locales se acercaron a escucharlo a uno. Llegan ciudadanos extranjeros con miras a entender qué pasa adentro y a hacer la labor que debía hacer el Gobierno Nacional de escuchar a las víctimas, de escuchar las quejas, los reclamos. Y, como todos sabemos, es que ellos, en vista de lo que recogieron, saben que la protesta es legítima, que ha habido abusos de la Policía, hacen recomendaciones al Ministerio de Defensa para que suelte a la Policía y el Gobierno se la pase al Ministerio del Interior para que la Policía no tenga vistas de enemigos internos sino de defensa ciudadana y el Gobierno lo niega todo, no acata las recomendaciones y se hacen los de los oídos sordos para no acatar los reclamos de la ciudadanía, que está siendo asesinada por la misma mano negra del Gobierno.

–¿Cómo se vivió la lucha de resistencia de los jóvenes después del asesinato de Lucas? Ha habido muchos detenidos, muchos torturados. Coméntenos sobre eso, que también hace parte de la barbarie ejercida por el régimen de Duque contra el Paro.

–Para nadie es un secreto que el gobierno que nos rige es un gobierno criminal, narcotraficante, eso es una realidad, no podemos taparlo con un dedo. En este momento, debido a que las marchas siguieron a pesar de la represión, empezaron a echar mano de las bandas de microtráfico para hacer presión a la ciudadanía, y como estas bandas y estas personas no tienen responsabilidad ante ninguna institución, también generan ese terror en la ciudadanía para que dejen de expresarse, para que dejen de luchar por sus derechos.

Acá en Pereira se está viviendo algo muy parecido a lo de Cali. La gran diferencia es que Pereira tiene el complejo de doña Florinda, eso lo tiene Pereira. Es un montón de gente con necesidades, con dificultades económicas, pero que tienden a las clases más privilegiadas. Así sepan y sean conscientes, no les importa que están siendo abusados en sus derechos. Entonces ese tipo de pensamiento en Pereira tan arraigado ha dificultado que sea más fuerte la protesta y, sin embargo, es increíble lo que se está viviendo acá, porque sabemos que Cali es más cosmopolita. Bogotá es una ciudad adonde llegan demasiadas personas con diferentes pensamientos, entonces hay una protesta más legítima, más llevada desde adentro. Que empiecen a nacer en esta región ciudadanos que también tienen ese pensamiento, esa lucha y esa resistencia es algo histórico para la región.

En la zona del barrio Cuba, que es la más alejada del centro de Pereira, han ocurrido situaciones de agresiones de la Policía a los ciudadanos, amenazas de muerte, disparos a los ciudadanos, muertos que no son reportados. Es una situación muy parecida a lo que ocurre en Cali, pero que ha sido muy ocultada porque no se ha visibilizado. Hay enfrentamientos y la ciudadanía no lo sabe. Y, casualmente, por las redes sociales no sé si es un logaritmo que han empezado a mover para que no salgan con frecuencia todas estas denuncias videográficas.

“A los 37 años, Lucas descubrió que la manera de tocar el alma de las personas era a través del físico, porque el físico es la expresión del alma, del espíritu”. (Foto: Luis Alfonso Mena S.). 

“LUCAS ERA ESA REPRESENTACIÓN DE LO QUE ES COLOMBIA”

–Estuvo usted en Cali en Puerto Resistencia. ¿De esa experiencia qué trajo para Pereira? Entiendo que también acá se va a construir colectivamente un monumento a la resistencia.

–Sí, entre los ciudadanos, los jóvenes, los estudiantes, todos determinaron que debía hacerse en el barrio Cuba, porque es el lugar que ha sido más reprimido, en vista también de imitar este mensaje que manda la ciudadanía de Cali con su monumento a la resistencia.

Cuando estuve en Cali fue muy bonito porque esos muchachos tenían todo un sector tomado. Para llegar a Puerto Resistencia tocaba dar una vuelta gigante. Inicialmente, cuando entré, fue un poquito difícil porque obviamente ellos están muy prevenidos. Uno de ellos ya había recibido un balazo, tenía una herida de bala y me contaban que había una mamá que estaba detrás de un escudo y le dispararon con un fusil y la mataron, una mamá con tres hijos.

Uno detrás de un escudo de metal qué se va a imaginar que le van a disparar con un fusil. Cuando llego allá y conozco a los muchachos, son muchachos que protegen los libros, que se pelean por los libros de manera jocosa, en el sentido de que se quieren leer un libro que otro no se ha terminado de leer. Son ciudadanos que buscan el conocimiento, no son pelados, como dicen, “vándalos”, son muchachos que quieren estudiar. Por ejemplo, hay uno que quiere estudiar filosofía, materias que les exploran la mente, que se la expande y ver que en medio de esa fragilidad y de esa sensibilidad humana está también la resistencia y la fortaleza de luchar. Eso lo pude evidenciar allá.

–Finalmente, ¿qué hacer para que el crimen de su hermano y los 80 asesinatos más que se han cometido en contra de los participantes en el Paro no queden en la impunidad?

–Memoria. Que todos tengamos esto en la memoria. Por eso yo como hermana tomé las banderas de Lucas, porque quiero que sea un recuerdo indeleble en los ciudadanos, no solo Lucas Villa, sino que Lucas Villa representa a la comunidad universitaria, al pueblo colombiano, un pueblo que canta, que baila, que se ríe de lo bueno y de lo malo. Lucas era esa representación de lo que es Colombia. Y saber que, así como es Colombia en la cosmogonía, en las vías del universo, ocurrió lo mismo que hacen con los colombianos: los violentan, los asesinan, los callan.

Permanezcamos recordando a todas estas personas que han caído, porque tuvieron en su mente la clara decisión de cambiar el país, porque esto no es de hoy, esto es algo que han vivido las personas en las zonas rurales por más de cien años. Estas guerras siempre han sucedido. La Guerra de los Mil Días, el Bogotazo, la masacre de Las Bananeras. Es la misma repetición, donde los estamentos, cuando hay una revolución de los ciudadanos que buscan derechos, simplemente los asesinan y se nos olvida y vuelve y pasa, y se nos olvida y vuelve y pasa.

Este es el momento de no olvidar para que podamos cambiar y lograr ese país tan hermoso que sabemos que es Colombia, porque la cultura, la ciudadanía es hermosa. No podemos seguir permitiendo que sigan abusando de nosotros unas cuantas familias que han permanecido en el poder.

(Entrevista realizada el jueves 15 de julio de 2021. Publicada el jueves 5 de agosto de 2021).

PERIODISMO LIBRE, CALI.


sábado, 31 de julio de 2021

Memorias de la Barbarie (III). Habla abogado de detenidos en Tuluá

Juan Carlos Herrera García, abogado de dos de los jóvenes detenidos en Tuluá por la Fiscalía de Iván Duque. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).

“CAPTURARON A MUCHACHOS INOCENTES, LOS TORTURARON Y LOS IMPUTARON”

Por Luis Alfonso Mena S.

El abogado Juan Carlos Herrera García es contundente al caracterizar lo que está ocurriendo con los jóvenes capturados en Tuluá y sindicados del incendio del Palacio de Justicia, sucedido el 25 de mayo de 2021. “Desde el mismo momento de la captura, a los muchachos se les violaron sus derechos como ciudadanos”, dijo

Herrera García, penalista defensor de dos de los seis jóvenes sometidos a un proceso judicial y recluidos en la cárcel de Popayán, acompañó a familiares de los investigados reunidos en la Plaza Céspedes de Tuluá, quienes portaban pancartas reclamando la libertad para sus muchachos: Daniel Navarrete, Jorge Andrés Noguera Flórez, Santiago Ramírez Duke, José Mauricio García Nieto, Jorge Mario Ramírez y Dan Brayan Andrade.

Con él hablamos para recoger su análisis de lo acontecido en Tuluá, en el marco de la documentación que estamos haciendo en Periodismo Libre de las arbitrariedades, violaciones de los derechos humanos, crímenes y otros actos de la barbarie cometida por el régimen de Iván Duque contra la juventud y el pueblo colombiano, al reprimir el Paro Nacional e incurrir en falsos positivos judiciales para responsabilizar sin pruebas a muchos jóvenes de episodios ocurridos desde el 28 de abril.

“El Juez de Control de Garantías hace un mal mandado al Ministro de Justicia y a la Fiscalía imponiendo una medida de aseguramiento sin tener los elementos suficientes para hacerlo, violando la Constitución”, expresó el jurista en relación con el caso de los detenidos en Tuluá.

“El daño moral se lo hicieron a las familias desde el primer día en que capturaron a muchachos inocentes, los golpearon, los torturaron, los amenazaron y, no quedando contentos con eso, les imputaron unos delitos gravísimos, los cuáles los tienen hoy privados de la libertad”, aseveró.

Según Herrera García, “algunos empresarios de la ciudad de Tuluá estaban interesados en levantar los bloqueos por la fuerza, con sangre”, y puntualizó: “Aquí ni siquiera había habido presencia del Esmad en ninguno de los días del paro. El día que hubo presencia, empezó la violencia en Tuluá”. He aquí la entrevista:

El Palacio de Justicia de Tuluá, luego de ser incendiado en extrañas circunstancias el martes 25 de mayo de 2021, un hecho aún no esclarecido. (Foto: Luis Alfonso Mena S.). 

HABÍAN SIDO ASESINADOS TRES MUCHACHOS

–Doctor Juan Carlos Herrera, ¿qué pasó ese día?, ¿por qué a seis jóvenes se les ha endilgado el delito de la quema del Palacio de Justicia?, ¿qué hay detrás de estas detenciones?

–Hay que plantear la situación desde un contexto político de lo que había pasado en razón de la protesta social que cumplía ya un mes en Colombia. Tuluá había sido un caso particularmente especial en temas de protesta social. En Buga había enfrentamientos y bloqueos casi desde el primer día. En Tuluá había una situación particular, pues había presentado una especial paz en torno a la protesta social.

Nosotros aquí registrábamos entre tres y cuatro marchas semanales muy nutridas, con bastante participación ciudadana. De hecho, a nivel nacional planteábamos esa situación en las redes sociales y en los noticieros porque Tuluá había sido ejemplo de tranquilidad y de paz y especialmente de la protesta social pacífica.

Cuando llegó la fecha del 25 de mayo, cuando se iba a cumplir un mes, en razón de una solicitud de unos empresarios, por sus relaciones, tal vez, con altos mandos de la Policía a nivel departamental, el Esmad penetra los puntos de bloqueo, por la fuerza desaloja los puntos de bloqueo, no sin dejar de mencionar que días antes a ese desalojo por la fuerza del Esmad, habían sido asesinados tres muchachos en las zonas de bloqueo, asesinatos que hasta el momento no ha podido la Fiscalía ni siquiera imputar a nadie porque las personas que capturaron después del asesinato de esos muchachos quedaron libres, pues se declaró ilegal la captura porque los muchachos fueron quienes realizaron la misma.

Ya el 25 de mayo, cuando se acercaba la celebración de un mes de estar en Paro a nivel de Colombia, y especialmente en Tuluá, los muchachos fueron desalojados el 24 por la fuerza en horas de la madrugada de los puntos de resistencia como ellos los llaman, 30 fueron capturados por la Policía, retenidos y en el transcurso de ese día 25 los devolvieron por la presión de los miembros de los grupos de Derechos Humanos y especialmente por la presión social y política que se ejercía sobre esa acción policial.

Ya en horas de la tarde se presentaron nuevas protestas en el centro. Ya la situación se sale de control y comenzaron a ser objeto de ataques con piedras por parte de la protesta social y de algunos muchachos que se dirigen al centro de la ciudad. Dicen que son los mismos muchachos que habían sido golpeados por la Policía en horas de la mañana, que les quemaron los zapatos, la ropa, al ser desalojados de los puntos de resistencia del puente de Las Mariposas y del puente de la salida norte de Tuluá, esos muchachos fueron retenidos y ya por la tarde, cuando fueron liberados, volvieron otra vez a la protesta.

Allí hubo enfrentamientos nuevamente con el Esmad. En horas de la noche esa situación se salió de las manos y es cuando surge un hecho que ha sido noticia a nivel nacional. El Palacio de Justicia de Tuluá, un edificio emblemático, que ha sido declarado patrimonio arquitectónico de la ciudad, un edificio que fue construido a mediados del siglo pasado, donde funcionaban los juzgados municipales y del Circuito de Tuluá, fue atacado por personas que lo incendiaron. La reacción de la Policía manifiesta que capturó a más de 25 personas esa noche.

De esas 25 personas, tres fueron capturadas cuando vandalizaban unos almacenes de motos, incluso cuando iban llevándose unos de esos vehículos, y los otros seis jóvenes, que se encuentran detenidos en la ciudad de Popayán, fueron capturados en diferentes sitios de Tuluá. A estos seis jóvenes la Fiscalía les ha imputado el delito de terrorismo.

Imagen del costado lateral del Palacio de Justicia de Tuluá, luego del incendio del 25 de mayo de 2021. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).

“NO SE NOS PERMITIÓ HABLAR CON LOS PROCESADOS”

Lo que pasa en este caso es algo especial. Desde el mismo momento de la captura, a los muchachos se les violaron sus derechos como ciudadanos. A toda persona que es capturada o aprehendida por la Policía debe comunicársele la razón por la cual es capturada e inmediatamente informarle a su familia y adicionalmente garantizarle el derecho a comunicarse con un abogado.

Ese simple derecho fue vulnerado porque no se nos permitió nunca, en ningún momento, ni siquiera hablar con alguno de los procesados. La Policía siempre nos obstaculizó la entrevista que teníamos que hacer con ellos, y solamente los vinimos a ver al momento de la captura. Todas esas situaciones se pusieron de presente ante el juez de control de garantías, pero hay una situación particular que ocurrió en ese hecho. El día después de haber sido incendiado el Palacio, después de haber sido capturados los muchachos, a Tuluá llegaron el Ministro de Justicia y el Fiscal General de la Nación. Casualmente al día siguiente fueron los muchachos judicializados por un juez de control de garantías de Buga, porque los juzgados penales municipales de control de garantías de Tuluá habían sido incinerados y no estaban trabajando, por lo que la diligencia se ejecutó en Buga.

Al ejecutarse en Buga y nosotros no tener acceso a la situación particular de ellos, a haber conocido los hechos por los cuales se les había capturado, no se conocieron circunstancias de modo, tiempo y lugar porque no pudimos hablar con ellos. Claro, al nosotros presentar las oposiciones en la audiencia, pues eran mínimas, porque quién más va a conocer la situación en la que es capturado que la persona detenida, el punto donde es capturada. Para buscar elementos materiales probatorios que nos permitieran oponernos a esas capturas, son los mismos capturados con quienes debemos hablar, porque ellos son los que saben dónde fueron retenidos.

Ese derecho fundamental que lo trae el Código de Procedimiento Penal, que son los derechos del capturado, fueron violados flagrantemente por la Policía y especialmente por la Judicatura, toda vez que no atendió los reclamos de los abogados al momento de la legalización.

Es tan complicada la situación, que no hubo ni siquiera elementos materiales probatorios que la Fiscalía presentara al juez para legalizar esa captura. Quiero poner un ejemplo: a uno de los jóvenes se le acusa de haber llevado en su poder una botella de gasolina con la cual intentaba supuestamente vandalizar e incendiar un CAI de la ciudad, pero ni la botella de gasolina, ni la foto, ni la experticia que refiriera qué clase de sustancia llevaba en la botella fue llevada ante el juez. Simplemente el informe de Policía decía eso y con eso el juez legalizó la captura, con eso legalizó la imputación, y con esos elementos el juez, a pesar de que son jóvenes sin antecedentes, de ser jóvenes con arraigo, de ser jóvenes estudiantes, el juez de control de garantías hace un mal mandado al Ministro de Justicia y a la Fiscalía imponiendo una medida de aseguramiento sin tener los elementos suficientes para imponerla, violando la Constitución.

Pero no quedando contentos con eso, al presentar los reclamos los abogados y las apelaciones, ya han pasado dos meses y el juez de segunda instancia no se pronuncia. Es una situación sobre la que debió haberse pronunciado con rapidez, porque es la libertad de seis jóvenes que están privados de ella por unos delitos que los abogados reclamamos en su momento que no había elementos materiales suficientes para imputarlos. Adicionalmente, violando todos los derechos de una persona privada de la libertad en estas circunstancias, fueron trasladados de la ciudad de Tuluá a la ciudad de Popayán, ya ahí sí violando y cortando toda posibilidad de comunicación que puedan tener la familia y los abogados con ellos para iniciar su proceso de defensa.

Recaudar estos elementos y estas entrevistas con que nosotros vamos a solicitar la revocatoria de la medida de aseguramiento no ha sido fácil. Hay personas que estaban aquí y que también fueron detenidas, como por ejemplo Leidy Johana Luna Chasoy, una ciudadana indígena que fue capturada con los jóvenes y a quien, adicionalmente, le cortó el cabello una patrullera de la Policía Nacional, nuevamente violando los derechos de los ciudadanos. Y, además, no ha sido posible que la Policía Nacional nos entregue la información del libro de población de la Policía donde se refiere cuántos jóvenes fueron capturados, a qué hora ingresaron al Comando de Policía y en qué condiciones. Ese día hubo más de 25 capturas y solamente estas seis personas fueron imputadas por el delito de terrorismo.

Quiero significar con esto que, por ejemplo, el joven Daniel Navarrete, un mecánico que salía de trabajar, que se vino en dirección a su casa y en razón de que, al observar la protesta social, los gases lacrimógenos y la gente corriendo, él también corrió, la Policía lo captura, se lo lleva y lo presenta como un “terrorista”. De este joven tenemos videos de la hora en la que está trabajando, de las vías por las que se movilizó, nunca está participando en la protesta social y cualquiera diría que es fácil para nosotros como abogados pedir la revocatoria de una medida de aseguramiento, pero por ejemplo este es el momento en que ni siquiera conocemos quién es el juez de conocimiento, no conocemos ni siquiera cuál es la decisión del juez de segunda instancia en cuanto a la solicitud de apelación de la medida de aseguramiento que se impuso.

Entonces claro, a uno como abogado se le dificulta cada vez más la situación, porque cuando fuimos a presentar la solicitud de revocatoria acá en Tuluá, donde ocurrieron los hechos, donde naturalmente tiene que hacerse la solicitud, los jueces dicen que se declaran impedidos para conocer de esto en razón de que fueron afectados por el daño, entonces que ellos no están en capacidad de ser neutrales y ecuánimes para tomar alguna decisión al respecto.

–¿Y ante esa flagrante violación del debido proceso no cabe una tutela?

–Si claro, lo que pasa es que para la acción de tutela tendríamos nosotros que primero solicitar la revocatoria de la medida y que se nos niegue esta medida y que adicionalmente nosotros apelemos y se retarden, como se ha retardado la apelación que hicimos respecto al día de la imputación y legalización de la captura. ¿Qué estamos haciendo ahora? Estamos recaudando los elementos, estamos terminando todo el trabajo investigativo.

Uno de los puntos del Palacio de Justicia de Tuluá atacados por los pirómanos el 25 de mayo fue su área de Archivos Judiciales. ¿Qué querían hacer desaparecer? (Foto: Luis Alfonso Mena S.).   

“ESTO ES UN ATAQUE CONTRA LA JUVENTUD QUE PROTESTA”

–¿Qué puede haber detrás de este episodio?

–Yo estoy seguro de que esto es un falso positivo, y lo es con la única intención de generar desazón y miedo dentro de la juventud, porque esto es un ataque directo contra la juventud que protesta, esto es un ataque directo contra la juventud inconforme en el país, y especialmente es un ataque directo contra la posibilidad que tienen los muchachos de la participación en esta protesta pacífica.

¿Por qué razón? Porque con esto cualquier muchacho que ve esta vulneración de derechos humanos, pues inmediatamente teme. Ahí, en medio de la protesta, también fue asesinado un muchacho, fue sicariado un joven estudiante de derecho, eso no hace sino generar miedo, ¿y de ese miedo quién se beneficia? Indudablemente el beneficio es político.

No conozco el primer funcionario, juez o fiscal que de verdad pague con su patrimonio estas violaciones de los derechos humanos y de la libertad, no conozco, para ellos esto no importa, va y viene, no importa, porque el último que de verdad paga estas indemnizaciones y este daño es el Estado, lo pagamos todos. Entonces, como a ningún juez ni a ningún fiscal le quitan su patrimonio por estas violaciones de derechos humanos, pues indudablemente esto va a seguir pasando, como ha venido pasando hace muchos años en Colombia.

–Todo indica que a los seis jóvenes detenidos les están cobrando un delito que no cometieron.

–Estos jóvenes son chivos expiatorios, ni siquiera pensaría uno que les están cobrando el incendio del Palacio, les están cobrando es que estuvieron veintitantos días en protesta pacífica, que estuvieron respetando a las autoridades porque aquí nunca se había lanzado una piedra, aquí lo único que se intentó fue desprestigiar la protesta social.

–¿Quiénes están detrás del incendio del Palacio?

–A uno le queda muy difícil decir quién está detrás del incendio del Palacio de Justicia, pero pensemos en esta reflexión: yo llevo 28 días en protesta social, he hecho dos o tres marchas por semana en una ciudad como Tuluá, y solamente el día que aparece el Esmad y la Policía a confrontar a los muchachos hay un incendio y hay casi actos de vandalismo y terrorismo en esta ciudad.

Aquí no hay ninguna posibilidad de asignarle a los muchachos la responsabilidad de ese vandalismo, porque es imposible que usted sea vándalo un día y 28 días anteriores en medio de la protesta social tomándose las calles, caminando la ciudad, no haya ni siquiera lanzado una piedra.

–¿Cuál es la salida jurídica?

–La salida jurídica son los elementos materiales probatorios que recaudemos y contrarrestemos la evidencia precaria que ha presentado la Fiscalía. Esto indudablemente tendrá que llevar alguna consecuencia, esto no puede quedarse así simplemente, porque en algún momento alguien con sentido común tendrá que revisar.

–Mientras tanto, hemos visto a unas madres, a unas hermanas, a unos familiares que están sufriendo intensamente.

–El daño está hecho, el daño moral se lo hicieron a las familias desde el primer día en que capturaron a muchachos inocentes, los golpearon, los torturaron, los amenazaron, y no quedando contestos con eso, les imputaron unos delitos gravísimos, los cuáles los tienen hoy privados de la libertad.

–¿Cuáles son los otros casos de violación de derechos humanos en Tuluá?

–Hay una situación particular: uno no puede desconocer la situación política y social de Tuluá específicamente y del centro del Valle. Esta es una zona que ha sido violenta históricamente. Esta es una ciudad con 180, 200 homicidios al año, no es una situación sencilla. Entonces, claro, disfrazar un homicidio político, represivo con un señalamiento a las bandas criminales es muy sencillo, como viceversa: las bandas criminales se podrían amparar en la situación política con cualquier homicidio que ocurra en el marco de esa protesta social.

Atreverse a decir que tal o cual homicidio es asignado a las fuerzas de represión del Estado a uno le quedaría muy difícil, porque nadie anda uniformado disparando a otro. De hecho, sobre el caso del joven Camilo Arango, que murió el 25 de mayo en Tuluá, nadie se atreve a denunciar porque eso fue en presencia de todo el mundo, eso no fue un homicidio por la espalda ni oculto, fue delante de todo mundo: dos personas en una moto le disparan a ese joven y lo asesinan delante de todos los ciudadanos, pero: ¿quién se atreve a denunciar y no corra el riesgo de sufrir el mismo daño? 

Le voy a contar una historia. Dos o tres días antes, una ambulancia prende sus sirenas para anunciar que le abran el corredor humanitario en el puente norte de la ciudad. Cuando los muchachos se acercan y le abren la barricada, desde un vehículo automóvil atrás les disparan y asesinan a dos.

–Este caso es de los que se han denominado en Cali paramilitarismo urbano, civiles armados disparando contra quienes participaban en el paro.

–Claro, y es lo que nosotros hemos referido y es la razón por la cual nosotros buscamos una mesa de concertación y de diálogo con los jóvenes del bloqueo, porque teníamos información de que algunos empresarios de la ciudad de Tuluá estaban interesados en levantar los bloqueos por la fuerza, con sangre.

Otro ángulo de la Sección de Archivo del Palacio de Justicia de Tuluá incinerado. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).

“EL DÍA QUE HUBO PRESENCIA DEL ESMAD EMPEZÓ LA VIOLENCIA”

–¿Qué papel se jugó ahí por parte de empresarios como instigadores?

–Lo que pasa es que esta es una región altamente marcada por el narcotráfico y el paramilitarismo. Entonces atreverse uno a señalar a ciertos grupos, a ciertos sectores es casi como ponerse una lápida en el cuello.

–Pero, ¿hubo instigación?

–Claro y, adicionalmente, en las redes sociales hay exalcaldes pidiendo el uso de la fuerza para el levantamiento del bloqueo, eso no tenía ningún otro final que el que se presentó en la ciudad de Tuluá, un hecho de violencia, de muerte, de sangre, y especialmente de dolor para muchas familias.

–Es decir que la clase dirigente de Tuluá también ha estado comprometida.

–Debe haber algún sector de la clase dirigente en eso, porque aquí ni siquiera había habido presencia del Esmad en ninguno de los días. El día que hubo presencia empezó la violencia en Tuluá.

–Finalmente, doctor Herrera García: ¿qué va a pasar con toda esta violación de derechos humanos que hasta ahora queda en la impunidad?

–Desde mi punto de vista creo que en Colombia esto ha sido toda la vida, esa ha sido la acción recurrente del Estado en contra de la protesta social y de los grupos minoritarios: la violación de los derechos humanos, la persecución política, la segregación social, casi que el abandono del Estado. Cualquiera que se permita enfrentar a esos grupos políticos que se han enquistado en los poderes municipales, es indudablemente señalado, macartizado e, incluso, asesinado. Por eso usted observa que estas ciudades que tienen un alto grado de marcación política conservadora, de extrema derecha, ha tenido mucha influencia de grupos paramilitares y especialmente de grupos del narcotráfico. Un tema casi que cultural es la acción violenta contra los ciudadanos. Esta es una ciudad con 190 mil habitantes con 180 homicidios al año, qué más puede uno referir como una violación de derechos humanos. No hay otra forma de actuar del Estado, hay una desatención del Estado, especialmente a esa población vulnerable que llama la atención para que se haga inversión social.

La clase vulnerable es casi el 90% de la población de este país, porque aquí los grupos económicos manejan sectorialmente los municipios, las mañas políticas manejan desde Bogotá estos municipios y es muy complicado para uno hacer activismo político, hacer activismo social y especialmente participar en esa protesta social política con la que uno quiere construir un país mejor. Es muy complicado en un país como Colombia, es muy complicado en una población como esta, enmarcado en la violencia.

(Entrevista realizada el sábado 17 de julio de 2021 y publicada el sábado 31 de julio de 2021).

PERIODISMO LIBRE CALI.

El sábado 17 de julio de 2021, familiares de los jóvenes capturados en Tuluá, se reunieron en la Plaza Céspedes para exigir la libertad de sus seres queridos. (Foto: Luis Alfonso Mena S.).