Las monarquías, sanguijuelas
de los pueblos europeos
Aunque muchos europeos son nostálgicos de los rituales de las monarquías, éstas no son más que verdaderas sanguijuelas de los presupuestos estatales que sostienen a familias parasitarias cuyo único mérito es ostentar una heredad de papel.
Ello ocurre con la “reina” de Inglaterra, pero también con los “reyes” de no pocos países de Europa, que han vuelto a la palestra con ocasión del gigantesco show mediático montado por la boda del llamado príncipe Guillermo y Kate Middleton.
De acuerdo con estimativos, el matrimonio les costó a los británicos la bobadita de 32.000 millones de dólares.
Según la página electrónica aporrea.org, republicanos británicos se congregaron el viernes 29 de abril en Londres en una fiesta de “No boda real”, en el mismo momento en que el país festejaba el enlace matrimonial.
“La fiesta ‘Not the royal wedding’ fue convocada por Republic, grupo según el cual hay entre 10 y 12 millones de británicos republicanos. Éstos quieren que la monarquía sea reemplazada por un jefe de Estado electo y que haya una nueva Constitución”.
La reina Isabel II, cuya fortuna ha sido estimada por la revista Forbes en 500 millones de dólares, recibe 42 millones de libras anuales (69 millones de dólares, 47 millones de euros) del Estado para cubrir el presupuesto de la casa real y sus gastos personales.
¡Qué tal el despropósito!
La venganza del Imperio, allende las fronteras
La arrogancia del imperio de EE.UU. quedó plasmada en la operación con la que se dio muerte a Osama bin Laden, el lunes 2 de mayo.
Sin respetar fronteras, como infinidad de veces ha ocurrido, el alto mando gringo incursionó en Pakistán, desembarcó tropas y asestó el golpe. Luego partió sin dar explicaciones.
Casi diez años después del ataque a las torres Gemelas, el nobel de “Paz”, Barak Obama, lideró la venganza.
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