El photoshop electoralLa campaña al Congreso se ha caracterizado por el bajo nivel del debate. Escasean las propuestas y pululan las vallas y las cuñas insulsas. Los partidos uribistas (de la U, Conservador y PIN) son los que más ostentación hacen en calles y avenidas de Cali.Por Luis Alfonso Mena S.
Ser candidato a algún cargo de elección popular sin plata, o por lo menos sin las grandes cantidades que se gastan hoy, resulta una misión difícil de cumplir en Colombia.
Como consecuencia de factores que ameritan un análisis aparte, las campañas políticas se encarecen cada vez más, y el dinero se vuelve el elector determinante.
La situación ha llegado a niveles preocupantes, tanto que el Consejo Nacional Electoral hizo graves denuncias sobre la actual campaña.
Según este organismo, los candidatos al Congreso de la República están gastando “toneladas de dinero”. En similares términos se han pronunciado otras entidades.
Uno de los parámetros, entre muchos otros, que permiten medir el altísimo gasto de algunas campañas en publicidad política son los pasacalles y, especialmente, las vallas.
Estas últimas pueden llegar a costar hasta $18 millones cada una, como lo denunció César Augusto Lemos, candidato del movimiento ASI a la Cámara de Representantes.
“Considero urgente una auditoría detallada a las finanzas de todas las campañas que adelante rápidamente y de emergencia una comisión del Consejo Nacional Electoral”, dice.
Y agrega: “Con una simple inspección del número de vallas, que tienen costo por unidad (de) entre $6.000.000 y $18.000.000, versus el número de las mismas que hay en la calle, la comisión detectará inmediatamente el desborde de los topes autorizados”.
Los uribistasUn recorrido efectuado por ¡PERIODISMO LIBRE! a lo largo de calles y avenidas de Cali encontró que son los partidos uribistas los de mayor derroche en vallas y pasacalles.
Tal vez uno de los más visibles es el candidato al Senado por el Partido de la U Roy Barreras, quien tiene elevadas y muy estratégicas vallas en puntos clave de la ciudad.
De igual manera, Barreras ha ordenado la instalación de numerosos pasacalles en los que aparece acompañado de tres aspirantes a la Cámara que hacen llave con él.
En la pugna interna del Partido de la U que Barreras tiene con Dilián Francisca Toro, la otra aspirante al Senado, Roy parece ir ganando en vallas, pero ella lo supera en la radio.
Porque en la radio y en los canales regionales y locales de televisión se escenifica también la campaña, a altísimos costos. Esos medios están en su momento. Y no lo desaprovechan.
Otro sector uribista que se destaca por la presencia inusitada de vallas y pasacalles es el controvertido Partido de Integración Nacional, PIN, nacido de Convergencia Ciudadana.
Éste, que usa un eslogan según el cual es “el partido del Presidente” y ha sido cuestionado por la presencia de familiares de parapolíticos en sus listas, tiene vallas por doquier.
(A propósito, qué tal el parecido del eslogan del PIN con el del conservador Andrés Felipe Arias, Uribito, quien se define en sus pasacalles como “el del Presidente”).
¿Qué dirán Arias y Barreras del PIN, partido uribista como los de ellos dos. Su jefe, el Presidente, tampoco lo menciona, pero espera sus votos en el próximo Congreso.
En las vallas y pasacalles del PIN sobresale Juan Carlos Rizzetto, un hombre desconocido para la mayoría que se ha hecho visible a punta de la multitudinaria publicidad callejera.
Comenzó su campaña en Alianza Democrática Nacional, ADN, pero al ser ilegalizado este partido por el Consejo Nacional Electoral dio un salto automático y… PIN.
Allí recalaron él y otros candidatos a la Cámara y al Senado sin mayores dificultades, pero sí con mucho despliegue de publicidad en las calles. Todo un enroque electoral.
Quienes conocen los intríngulis de este partido insisten en que Rizzetto y sus amigos son los candidatos del gobernador Juan Carlos Abadía.
Los aliados regionales de Uribito, Santiago Castro, al Senado, y Cristian Garcés, a la Cámara, también tienen gigantescas vallas en puntos neurálgicos de la capital del Valle.
Al parecer a éstos no les preocupan los enormes cuestionamientos que pesan sobre Andrés Felipe Arias, su líder, en relación con AIS, los regalos a los ricos terratenientes.
El candidato del Alcalde
Pero el candidato al Senado del alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, su hermano Mauricio, no se queda atrás en materia de estos costosos medios de publicidad.
Mauricio Ospina aterrizó de un momento a otro en el Polo Democrático Alternativo, PDA, a pesar de que Jorge Iván había sido elegido a nombre del movimiento Podemos Cali.
Este es un grupo de ex militantes del M-19 que contó con el apoyo de un sector del Polo y del partido del hoy gobernador Abadía para ganar la Alcaldía en 2007.
En el PDA muchos creen que la inclusión de Mauricio Ospina es una decisión oportunista, pues su única carta de presentación es precisamente ser hermano del Alcalde.
Y se extrañan de que en la lista de este partido sean incluidos aspirantes sin trayectoria de izquierda, que incluso obran de manera vergonzante con los colores e ideas del Polo.
Todo indica que lo realmente importante para el candidato del Alcalde es el aval que le podía brindar el Polo, que tiene personería jurídica de las autoridades electorales.
Wilson Arias, candidato de la izquierda del Polo a la Cámara, recordó que la ley prohíbe la doble militancia política, como en la que habría incurrido Ospina.
“Conmino a los hermanos Ospina y a sus allegados a que realicen su actividad política desde Podemos Cali, que es la organización a la cual realmente pertenecen. Es lo más honrado que pueden hacer”, dijo Arias.
Mientras tanto, crecen las denuncias sobre la intervención de la maquinaria de la Alcaldía en la campaña de Mauricio Ospina, apoyado por empleados y programas.
Uno de los casos puestos al descubierto es el del asesor del Alcalde, el comunicador social Alfredo Valenzuela, grabado en pleno ejercicio proselitista en una reunión barrial.
Luego de la denuncia aparecida en Noticias Uno, Valenzuela fue entrevistado por la W Radio. Allí se enredó al tratar de justificar su comportamiento.
El gran argumento que presentó el acorralado asesor fue que hacer lo que él hacía estaba “de moda”. En Cali todo el mundo habla de esto, dijo el funcionario.
“Se requiere un alto sentido de la ética en el gobernante y en sus allegados, sean ellos de apellido Ospina Gómez o Uribe Vélez”, dijo Wilson Arias Castillo.
“Que el gobernante y sus familiares desistan del abuso del poder, la presión sobre los contratistas, la repartija burocrática y el burdo clientelismo”, puntualizó.
Mientras tanto, la campaña al Senado y a la Cámara se sigue definiendo por el bajo nivel del debate, pues escasean las propuestas y pululan las vallas y las cuñas insulsas.
Es más, muchos candidatos ni siquiera saben a qué van al Congreso, confunden el poder legislativo con el ejecutivo, y sus propuestas son simples enunciados demagógicos.
Olvidan o no saben que los congresistas no gobiernan sino que legislan, y en tal sentido deben promover y estudiar proyectos de ley y, además, ejercer control político.
Da grima oír aspirantes enunciando sandeces, generalidades, oraciones vacías, sin sentido. La sociedad tiene la palabra para dilucidar por quiénes votará.
En todo caso, las fotos y los números en vallas y pasacalles no bastan. Por mucho photoshop que tengan sus imágenes, lo que valen de verdad son las trayectorias y las ideas.
Reportaje Gráfico de Santiago José Mena Cárdenas.*** Las tres primeras fotos muestran el despliegue publicitario de la campaña de Roy Barreras: grandes vallas, profusión de pasacalles con los aspirantes a la Cámara que lo apoyan y toma hasta de los postes de la energía eléctrica. Barreras no desaprovecha espacio libre...
*** La cuarta gráfica corrresponde a una supervalla en la Avenida Paso Ancho de la dupla Castro Garcés, los amigos de Uribito.
*** La quinta y la sexta fotografías muestran el paso dado por Juan Carlos Rizzetto, uno de los candidatos que más vallas tienen, de un partido a otro. Estaba en ADN y al ser ilegalizado éste salto y... PIN, ya estaba en otro acomodado con sus amigos.
*** En la foto número siete, Mauricio Ospina, el candidato del Alcalde, en una de las varias vallas gigantes de su campaña. Cambió el amarillo del Polo por el verde...
*** En la gráfica ocho, los candidatos de la U peleándose el cielo de la Avenida Paso Ancho.
*** La foto nueve muestra el enredo de pasacalles. ¿Elegirá la gente con base en este sancocho de telas y photoshop?
*** La última imagen corresponde a Shelsy, aspirante de la comunidad lgtb con el aval del Partido Liberal. Una valla suya ha causado controversia.